[Memory Card] Jurassic Park Megadrive

65 millones de años hace que los dinosaurios poblaron la tierra. Y casi fue ese el tiempo que tuvimos que esperar a que nuestro buen amigo Spielberg adaptase la novela de Michael Crichton. Una historia de fantasía y realidad mezcladas que daban como resultado una trepidante película de acción y aventuras, al más puro estilo Indiana Jones. Siendo un éxito entre crítica y público no tardaron en aparecer todo tipo de artículos de merchandising sobre la “dinomanía”. El mundo del videojuego no podía ser menos y en el año 1993 Blue Sky fue la encargada de traernos esta grandísima adaptación libre de la película de Spielberg.

La primera reseña que se debe hacer es que esta versión para Megadrive es diferente a la versión aparecida para Super Nintendo (al igual que las secuelas para ambas plataformas). En este estupendo juego podíamos ponernos en la piel de un doctor Grant más aventurero que nunca o ver el mundo de Jurassic Park bajo la atenta mirada de otra de las estrellas del film, un velociraptor. En ambos casos debíamos abrirnos paso a través de las diferentes estancias del complejo. Mientras que el doctor Grant hacía uso de armas lanzadoras de dardos tranquilizantes, granadas de humo o incluso cohetes, el velociraptor daba buena cuenta de sus enemigos (tanto humanos como animales) con sus propias garras. Además, hacía gala de una increíble agilidad que le hacía acceder a sitios inalcanzables para un humano como nosotros.

Graficos

El título sorprendía desde el minuto cero gracias a una cinemática en la que podíamos ver como un Tyranosaurus Rex zarandeaba nuestro coche. Sinceramente 20 años después, sorprende ver lo bien hecha que esta dicha cinemática. Los entornos estaban bastante bien detallados, varios planos daban una sensación de relleno bastante notable. Muchas estancias diferentes, elementos manejables del entorno, niveles de agua, diferentes modelados de personajes…. un nivel gráfico que se podría considerar de uno de los mejores de sus tiempos.

El único pero que tiene este juego a nivel gráfico serían las animaciones. No es que sean malas, simplemente algunas se ve que no van todo lo fluidas que en un principio deberían. Cierto es que no son todas ni mucho menos, pero al ver moverse al primer Triceratops uno se da cuenta de que no es oro todo lo que reluce. Esto quizás fue debido a que el título contaba con una gran cantidad de niveles, sprites, etc. que copaban la gran mayoría de megabytes del cartucho y era imposible animarlo de una mejor manera.

Sonido

Otro apartado en el que Blue Sky hizo un trabajao excelente, más  concretamente fue Sam Powell el creador de la música para este título. Unas melodías que no son pegadizas, que no son épicas y que seguramente años después no te acuerdes de ellas; pero que en el momento que escuches un par de notas reconocerás al instante y harán que sientas de nuevo todo aquello que sentías al oírlas. Temas muy acordes con la acción, con lo que se mostraba en pantalla y que eran las idóneas para cada menú o nivel del juego.

Los sonidos Fx, es decir los gritos de Grant, los sonidos del Velociraptor, el sonido producido al recoger un ítem… tenían una calidad bastante alta. Algo inusual para Megadrive que disponía de un chip de sonido inferior al de Super Nintendo.

Tanto las músicas como los efectos de sonido no brillaban por su número pero sí por la calidad. Quizás algo escasos una vez vistas las primeras pantallas, pero suficientes para mantener la inmersión.

Jugabilidad

El manejar al doctor Alan Grant era una verdadera pasada. Perdonadme que sea tan efusivo en este tema, pero para un niño de 11 o 12 años como era yo, el poder controlar a uno de los “héroes” de la generación era algo menos que impensable. Un plataformas de scroll lateral en el que avanzábamos en diferentes alturas haciendo gala de nuestra habilidad a la vez que disparábamos, era poco menos que un sueño hecho realidad.

Una estructura coherente de los niveles con una serie de sencillos puzzles a resolver rápidamente para avanzar le daban a Parque Jurásico un aire diferente a los plataformas convencionales. Podíamos trepar, saltar, disaparar, trepar e incluso manejar una barca en pleno río. Era totalmente un juego de aventuras, un Indiana Jones de nuestros tiempos.

Valoración Personal

Otra de esas grandes joyas que dio Megadrive y que quedará para el recuerdo por su frenético desarrollo y la posibilidad de poder elegir un dinosaurio como personaje principal a controlar. El único pero que se le puede achacar es su corta duración y un final nada digno en la parte en la que llevamos a Grant. Por lo demás un título altamente recomendable y un gran plataformas no convencional.