Mis 10 principios de belleza

Hola! Empecé a maquillarme en la universidad (¡y ya son años!), y tras miles de experimentos y probaturas, he desarrollado algunos trucos de belleza que me aplico para sentirme mejor.
En lo que a belleza se refiere intento cuidarme para sentirme mejor conmigo misma; y desde el cuidado de la piel hasta arreglarse las uñas hay toda una filosofía general que a cada una le funciona de una manera diferente. Estos son los 10 principios de belleza que yo sigo y me funcionan:
#1 En cualquier momento: Suelo llevar en el bolso algunos esenciales porque nunca se sabe si tardaré en llegar a casa y necesitaré un retoque del maquillaje. En esta pequeña bolsita incluyo: corrector, colorete, pintalabios y máscara de pestañas.
#2 Saber lo que nos favorece: Muchas de nosotras tenemos esos días en los que no nos sentimos nada glamurosas, incluso con maquillaje. Para esos momentos, es bueno conocer algunos truquillos que nos harán tener un mejor aspecto. Consejos para llevar unos labios perfectos, tips para llevar unas cejas perfectas o trucos de maquillaje para corregir defectos de los ojos.
#3 Sin frotar: Si me levanto con una aspereza, tengo una pequeña costra en la piel, o incluso me pican los ojos, nunca me froto ni lo rasco. A nuestra edad las rojeces salen inmediatamente y corremos el riesgo de provocarnos marcas en la piel, que ahora es más sensible.
#4 Manos bonitas: Tener las uñas cuidadas es más importante de lo que nos creemos pues dicen mucho de nosotras. No es necesario llevar siempre hecha la manicura, si bien tener las uñas pintadas ayuda mucho. Yo siempre me las arreglo en casa para llevarlas cortitas y limadas; y muchas veces me hago la manicura fuera, sobre todo, cuando quiero llevar las uñas pintadas de algún color oscuro.
#5 No hacer ejercicio físico maquillada pues el maquillaje no facilita la transpiración.
#6 Huir del sol: Si todo el mundo dice que debemos protegernos la piel del sol será por algo. En mi juventud solía pasarme las horas largas cara al sol en busca del bronceado. Ahora, las únicas cremas que utilizo tienen factor de protección +50, incluso en invierno, y nunca salgo a la calle sin aplicármela.
#7 Rutina de protección solar: Además de aplicarme la crema en la cara, también me la pongo en las manos, sobre todo en el dorso, en el cuello, el escote y las orejas (una de las zonas de mayor riesgo para quemarse, ya que suelen ser las más descuidadas).
#8 No aplicar calor al cabello: Por lo general, suelo secarme el pelo al aire cuando me lo lavo y no utilizo secador. Y una vez a la semana me aplico una mascarilla para una nutrición más profunda.
#9 Nunca nunca dormir maquillada: Antes de meterme en la cama limpio profusamente la cara con un gel limpiador al agua y tónico micelar. De todos modos, siempre tengo a mano unas toallitas desmaquillantes por si algún día tengo pereza o me corre prisa retirar el maquillaje. Eso sí, en esos casos al día siguiente me exfolio la cara.
#10 Ropa de cama limpia: Si llevamos bastante tiempo sin lluvia y los niveles de contaminación son altos, cambio las fundas de la almohada más de lo habitual para evitar problemas en la piel de la cara. Los productos que usamos para el pelo, la suciedad ambiental, y la grasa se acumulan muy rápida y fácilmente, y eso termina perjudicando a los poros del rostro, que ya no respiran tan fluidamente.
Espero que os haya sido de ayuda y nos vemos mañana!!
Imagen superior vía American Countryside