Mis ojos te recuerdan cual frágil azucena,
la niña de las trenzas, de los ojos azules.
Mi corazón amaba tu cutis de madera
tus dedos mariposas, tus alas de paloma.
Tu piel era un camino de seda y de ternura
y olías como el bosque más puro de la selva...
Hoy el tiempo te ha obsequiado más curvas y más garbo.
ya no eres azucena, mas bien eres primavera.
Y la playa de mis sueños y la isla de mi canto,
con ese mismo cielo, con esa misma candela.
Fue gris aquella tarde, que de golpe la vida,
arrancó de mí,
tu tallo y tus raíces
y enmudeció el jardín desde aquel otoño,
triste, tras la ausencia que llegó cuando te fuiste.
Hoy no sabría explicar… qué vuela aquí en mi
sangre,
verte así de nuevo, ha despertado mis latidos.
Como un sol de mediodía, con rayos penetrantes,
de pronto te apareces y revives mis sentidos.
versos ineditos, poemas de amor, versos romanticos, versos del recuerdo, poemas y poesia.
Recuerdia