Momentos

De eso se trata la vida, de momentos. Cada uno de ellos, buenos o malos, sacarán al exterior rasgos de nuestra personalidad. Los que te conocen bien no se sorprenderán y aceptarán de igual manera que proyectes luz u oscuridad según las circunstancias que te toquen vivir.

Siendo jóvenes (más jóvenes que ahora), la vida nos enseña un mundo diferente, lleno de  locura que en algún punto es efectiva para sentirnos vivos, pero que más pronto que tarde también nos da algunas lecciones. Nos damos cuenta de que el amor (el pasional o el familiar), no es eso que vemos en las películas y va tomando una forma más sólida, más justa y más significativa para nosotros. Desaparecen los mitos y viene la realidad. Siempre escuché que la felicidad se busca y que no se presenta ante ti con una forma especial para que puedas identificarla, por eso muchas veces la dejamos pasar delante de nuestras narices sin entender absolutamente nada.

En esos momentos en los que estás pletórica o por el contrario, hundida y con ganas de no salir de la cama en 10 años, debemos buscar en las cosas que solemos creer insignificantes, porque para un lado o para el otro, puedes encontrarle sentido a “eso” que en otro momento no eras capaz de ver.  Respeta el derecho del otro, y también el tuyo. Tienes derecho a reírte de tus errores, a sonreírle a tus triunfos. Derecho a estar como te dé la gana. Sólo busca tu felicidad, consíguela con esfuerzo, sintiéndote merecedora de ello, sin que nadie juzgue lo que decidas, porque si te equivocas nadie pagará por ti. Sé tú mismo y no te tengas miedo.

Camisa: Pimkie (old)

Chaqueta: encuentro (old)

Pantalón: Pimkie (old)

Bolso: Stradivarius (old)

Botines: Pimkie (old)

Collar y Brazalete: Mercadillo

“La felicidad humana generalmente no se logra con grandes golpes de suerte, que pueden ocurrir pocas veces, sino con pequeñas cosas que ocurren todos los días”