Momias de calabaza

Halloween. A estas alturas de la película todos sabemos que esta fiesta importada de EEUU se ha convertido en una de las fiestas más populares de todo el mundo. Brujas, momias, zombies o payasos son algunas de las criaturas que podremos ver caminando por las calles de nuestros pueblos y ciudades el próximo lunes por la noche. Sin lugar a dudas, el mayor icono de estas fiestas son las calabazas, decoradas de mil maneras distintas y, cómo no podía ser de otra manera, la comida más característica de Halloween tiene como papel principal la calabaza. La verdad es que las calabazas pueden cocinarse de mil maneras distintas ya que dan muchísimo juego tanto en platos con carnes, pescados, comida vegetariana, vegana, repostería…Hoy, cómo no podría ser de otra manera, vamos a usar las calabazas para hacer unas galletas increíblemente buenas, llenas de sabor y que encantarán a todo el mundo. La masa que he usado en esta receta es una masa quebrada dulce, ya que es bastante sencilla de hacer y de manejar. Además, a la hora de hacer las vendas es muy cómoda, ya que apenas se rompe y es muy fácil de moldear.IngredientesPara la masa

• 250gr de harina de fuerza
• 150g de mantequilla fría
• Azúcar glas
• 1 huevo
• Agua fría
• Sal
• Chocolate de repostería en polvo (Opcional)

Para el relleno

• 300gr de calabaza
• Azúcar moreno
• Mermelada de frambuesa
• Especias en polvo (nuez moscada, canela, jengibre y clavo)

Para el acabado

• 1 huevo
• Azúcar moreno
• Especias en polvo (nuez moscada, canela, jengibre y clavo)
• Lacasitos

PasosLo primero de todo vamos a hacer la masa. Como ya expliqué en la tarta de paraguayos, hay que trocear la mantequilla fría y mezclarla muy bien con la harina y una pizca de sal. Si queréis darle un toque a chocolate podéis ponerle un par de cucharadas soperas de cacao en polvo de repostería, o incluso un poco de café instantáneo, que también podría quedarle bien. Si lo hacéis con trozos muy grandes os costará la vida, ya que la mantequilla fría es bastante dura. Cuando la mantequilla se haya integrado muy bien añadid un par de cucharadas soperas de azúcar glass. Yo le puse dos cucharadas soperas, aunque creo que una cucharada más le hubiese venido mejor. Mezcladlo muy bien con las manos hasta que se integre bien. Añadid entonces un huevo batido y mezcladlo todo muy bien. Adicionad una cucharada sopera de agua bien fría para terminar de integrar todos los ingredientes. En otras recetas uso más agua, pero en esta receta hemos añadido azúcar, que va a dejar la masa más blanda, por lo que con una cucharada yo pienso que es más que suficiente. Amasad bien la masa y si hiciera falta añadid más harina, hasta que obtengamos una masa firme, que no se pega y que puede manejarse sin problemas. Dejad que la masa repose durante media hora como poco.Mientras tanto, vamos a cocinar la calabaza. Podemos hacerlo de tres maneras:

1. -  Cocerla en un cazo con un poco de agua
2. -  Al horno
3. -  Al microondas

A mí particularmente no me gusta cocerla para esta receta, ya que hay que evitar que tenga mucha agua para que el resultado sea el correcto, por lo que yo recomiendo hacerla al microondas o al horno. Yo la hice en el microondas, la tuve unos siete minutos y se hizo bastante bien. Aprovechad ahora para encender el horno a 200ºC para que se vaya calentando.Cuando tengáis la calabaza cocinada, de la manera que más rabia os de, machacadla con un tenedor o algo similar hasta que toda la calabaza esté hecha una pasta. Añadid ahora dos cucharadas soperas de mermelada de frambuesa, otras dos de azúcar moreno, una cucharadita de canela, media cucharadita de jengibre en polvo, otra media de nuez moscada y un espolvoreado de clavo. Mezclad todo muy bien y dejad que se enfríe un poco.Cuando la masa ya haya reposado extendedla con un rodillo y recortadla en círculos o en muñecos usando cortadores con formas o con vasos. Si queréis darle otra forma sois libres de hacerlo. No gastéis toda la masa ahora, reservad un poco para hacer las vendas. A cada galleta ponedle un poco de la calabaza especiada que hemos preparado. Esta mezcla no se extiende mucho, por lo que si queréis cargarla bastante podéis hacerlo con tranquilidad.Extended ahora el resto de la masa y cortad las tiras para hacer las vendas de las momias. Yo utilicé un cortador de pizza de toda la vida, que es lo que mejor funciona. Colocad las vendas sobre las galletas de modo que parezca una momia, dejando un espacio para los ojos. Cuando las tengáis todas hechas batid un huevo y pintadlas. Mezclad unas dos cucharadas de azúcar moreno con media cucharadita de canela, media de jengibre, otra media de nuez moscada y un pelín de clavo en polvo, exactamente igual que antes. Espolvoread esta mezcla sobre las galletas una vez las tengáis pintadas y metedlas al horno, que estará ya a unos 200ºC. Cocedlas durante media hora aproximadamente, pero ya sabéis que no tenéis que quitarles el ojo de encima, que cada horno es un mundo.  Cuando las saquéis del horno tenéis que ponerle los ojos y, cómo ya os habréis imaginado, vamos a utilizar lacasitos blancos para ello. Hacedlo lo más rápido posible, mientras que la masa siga caliente por si tenéis que moverle alguna venda. Si tenéis un poco de colorante alimentario podéis pintarle las pupilas de los ojos con muchísimo cuidado de no dejar ninguna pupila deforme o extra grande, aunque es Halloween, y todo vale. Dejad que se enfríen un poco y podréis coméroslas.
Feliz Halloween a todos!!!