Yo como dominicana cada día estoy más liberada y forzada para votar a un candidato que me ofrezca responsabilidad, y hoy escribo por mi voluntad en nombre también de mis amigas, preguntándonos si nuestra opinión servirá para sumar el cambio, pues nerviosas estamos de no ver un futuro más seguro y esperanzador.
Carta abierta de una ciudadana dominicana después de leer detenidamente el artículo aparecido en solitarios invisibles el 11 de marzo 2020, promesa que cumplimentamos y que disipará cualquier género de dudas de la imparcialidad de nuestro medio con el tratamiento de las políticas más dispares.
Queridos compatriotas :
El PLD (Partido de la Liberación Dominicana) es un resabiado experto en dañar todo lo que es favorable al país, utilizando los fondos públicos, el dinero que debería redistribuirse al pueblo para dilapidarlo en una permanente campaña de imagen basada en decir lo que se hace para nunca terminar de hacerlo, lo que provoca un daño irreparable a nuestra querida República Dominicana.
En la presente, como en otras campañas promocionales del PLD se desprende una suciedad que les será difícil limpiar, proveniente del "acorazado" y protegido oficialismo, dejando que la política local se entristezca por el incumplimiento de las nuevas leyes electorales que no se obligan y nadie es capaz de hacerlas cumplir.
Nuestro país está pasando por un momento histórico muy turbulento, de cambios importantes que deben realizarse cuanto antes, viendo como el partido en el poder y sus satélites que le rodean para seguir obteniendo migajas, se han atrevido a malversar con premeditación y alevosía lo nunca visto en una república que en teoría rebosa de plena democracia, refiriéndome al acto chantajista y criminal de entorpecer la voluntad del pueblo el pasado 15 de febrero 2020, en donde se torpedeo la dignidad, saboteando las urnas y dando por suspendidas las votaciones a las alcaldías. Y ese gran disparate lo han hecho sin conocer las consecuencias y las reacciones de las personas, demostrando que sus errores no pasan de largo, por lo que no puedo entender que no se haga una investigación en profundidad empezando por averiguar el contenido de las cámaras del 911, en las que no nos sorprendería ver como se ríen a mandíbula batiente de nosotros, igual que lo hacen de los ciudadanos de todas las edades que se manifiestan en la Plaza de la Bandera para reclamar que los derechos y libertades se utilicen como un juego de rol.
El PDL cada vez lo tengo más claro, es lo que representa una dictadura teñida de democracia irreal, por esa razón y por la necesidad de no compartir el olor nauseabundo que desprende el ofrecimiento de seguir en el mandato arrastrando una lacra humana de servilismo nunca visto en un gobierno, he decidido votar a PRM (Partido Revolucionario Moderno) cuyo líder Luis Abinader no tiene huella por haberse manchado en ninguna refriega asquerosa, agradeciéndole en lo personal por haber contado con Raquel Peña y la confianza que ella desprende como una mujer de las que muchas nos sentimos representadas por ella.
Con lo dicho arriba me parece una apuesta estratégica de primera categoría, ya que Raquel Peña y su comitiva de fuerza y demostrada gestión aporta el 50% del territorio dominicano cuya base es el Cibao que recoge el 40% de la población dominicana.
Suerte, y espero que el cambio no se quede en solo palabras, pues como yo muchas estamos convencidas que Abinader demostrará tener capacidad de dirigir a un país que ahora más que nunca necesita de una fuerza intelectual de hierro, y no del sabroso aguacate con el que se despacha todos los días el actual gobierno y al que todos tenemos derecho.
Gracias y adelante.
Viviana Montesol G. ( Marketing Turístico )
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