Se trata de un azul navy muy oscuro. De hecho, si no lo comparamos con otros colores, o sin la luz directa del sol, parece negro. Os hice las fotos en un momento de buena luz solar para que apreciarais bien la tonalidad azulada. Puede parecer un color muy simple, pero es algo que lo hace muy ponible, ya que es un color clásico y elegante.
La textura es muy cremosa e increiblemente cubriente. Con una capa es suficiente, aunque yo siempre aplico dos, ya que queda un resultado más bonito y uniforme.
Sin embargo, no todo son puntos positivos en este esmalte. Algo que me ha decepcionado bastante es su duración. Si bien los esmaltes de OPI tienen fama de una duración fabulosa, este esmalte me dura impecable menos de un día. Quizá porque es un color oscuro y las imperfecciones tienden a verse con más facilidad que en el caso de los esmaltes de tonalidades más claras. Cuando hice estas fotos, el esmalte llevaba aproximadamente 24 horas puesto.
Y a vosotras, ¿os gusta? ¿Sois fans de los esmaltes de OPI?
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