La empresa británica Dunlop presentó en el año 1963 unos nuevos neumáticos para hielo que dentro del caucho tenían unos finos alambres de carburo de tungsteno. La función de estos alambrecitos era clavarse en el suelo que estuviera cubierto con hielo.
En las dos fotografías que ilustran esta vieja noticia vemos a un Austin Mini en plena demostración en una pista de hielo. Las patinadoras solo están para demostrar cabalmente el tipo de suelo por donde circula el pequeño automóvil inglés. Las fotografías fueron tomadas de la revista Parabrisas número 28 de marzo de 1963.
Mauricio UldaneEditor de Archivo de autos
Archivo de autos tiene Internet propia financiada por sus seguidores y por publicidad en este blog.