No me gusta mi jefe porque es un desequilibrado

" No me gusta mi jefe" era (o es) uno de los varios blogs que tenía (o tiene) Joan Carles March, y con el título de hoy quiero rendirle homenaje (al blog, a la persona y a ambos a la vez). Algún día, amigo Joan Carles, terminaremos ese proyecto que se nos quedó a medias, algún día...

¿Es tu jefe un desequilibrado?

Que cada jefe es de su padre y de su madre es algo normal, también lo somos los trabajadores, algunos incluso más raros que un perro verde, y no sé cómo se las apañan líderes, lideresas, jefes y jefecillos para tratar con ellos.

Pero sobre las personas de la organización y sus "cadaunadas" ya hemos hablado en alguna otra ocasión, y lo retomaremos cada vez que sea menester. Hoy toca hablar de ellos, de los jefes, de los desequilibrados y de los otros, que de todo hay en la viña del señor...

La excusa nos la da el siguiente artículo 7 tipos de jefes y cómo lidiar con ellos que publican nuestros amigos de Equipos&Talento:

El micromanager, el compañero, el equilibrado son algunos de los tipos de jefe que uno puede encontrarse a lo largo de su vida laboral.

Vamos a empezar por el final, vamos a analizar lo que viene siendo un jefe equilibrado, y así podremos asegurar con los datos en la mano si nuestro jefe es un desequilibrado o no lo es.

El perfil ideal del jefe equilibrado sería aquel que da a sus empleados flexibilidad, que se muestra accesible sin cruzar la línea profesional y que podrá cambiar de opinión sin perder de vista los objetivos iniciales. Por eso, encontrarte con este tipo de jefe es bastante inusual (vamos, como encontrarse con un pokemon legendario) ya que encarna muchas cualidades a la vez y, además, es capaz de mantenerlas de manera equilibrada.

Va a ser que no, ¿verdad? Que vuestro jefe equilibrado, lo que se dice equilibrado no es que sea. No pasa nada, palabra, parece ser que es lo más habitual.

Os dejo pues con otro tipo de especímenes algo más habituales por estos mundos laborales que Dios nos ha dado y ya me vais contando cuál es el que más abunda por vuestros alrededores:

1. El disparador. Es un tipo de persona que está desesperado por subir de rango en la escalera corporativa y únicamente se centra en cómo su trabajo le hace quedar a los ojos de sus superiores. Puede ser narcisista y egoísta e incluso es posible que se crea con poder sobre los demás. Tiene un carácter dominante e inflexible, motivo por el cual podría imponer reglas estrictas y plazos de entrega limitados a sus subordinados.
2. El micromanager. El micromanager es aquel que le gusta profundizar en los detalles y tiene tendencia a decir a los demás qué hacer y cómo deben hacerlo. No suelen atender a opiniones externas, de modo que es probable que por mucho que se les exprese, ellos mantengan su propia posición.
3. El compañero. Responde al tipo de persona que quiere ser tu amigo en el trabajo. Siempre saluda, es amable y alegre, no establece plazos de entrega estrictos y cuando da feedback lo hace de la manera más suave posible. Con él, es posible conseguir flexibilidad en las tareas. Sin embargo, el feedback que aporta es poco constructivo para mejorar las habilidades personales.
4. El cazador de objetos brillantes. Es un tipo de persona que empezará la semana exigiendo unos objetivos y a lo largo de los días irá cambiando de opinión. Por ejemplo, si ve que una aplicación está teniendo éxito querrá invertir esfuerzos en ella, hasta que aparezca otra novedad y así constantemente.
5. El apático. El apático no se preocupa por su trabajo. Por eso, resultará muy difícil comunicarse con él y recibir algún tipo de feedback o consejo. Lo mejor aquí es el intercambio de ideas entre los compañeros para nutrirse de información.

Pues hala, ya tenéis la información más que necesaria para afirmar que no os gusta vuestro jefe porque es un desequilibrado sin temor a equivocaros, jejeje...