No puedo vivir sin... (edición verano)

Cada época del año, cada estación, cada mes o, en ocasiones según el día y el humor con el que nos levantamos, nos apetecen diferentes cosas; otra ropa, otro tipo de calzado, otras comidas, otros libros, otras películas, otros cosméticos. En definitiva, nos gusta el cambio y el experimento. Nos gusta ser diferentes.
Pero en ocasiones, ese cambio, se acaba por convertir en algo permanente y es cuando creamos cosas favoritas, nos creamos necesidades, cosas sin las que no podemos vivir, nuestros imprescindibles.
Yo tengo imprescindibles duraderos y otros que son más cambiantes según el mes o la época del año, así que, a pesar de seguir siempre probando y buscando, descubriendo y aprendiendo, hay cosas a las que me gusta serles fiel. ¿Queréis cotillear un poco? Pues hoy os presento a 6 de mis amores de verano.
1-Limpiador facial Kracie Naive 
Desde que hace unos meses empecé a descubrir la cosmética asiática, mi asombro y amor por estos productos no ha dejado de crecer, especialmente debido a lo cuidadosos que son con la piel, incluso las más sensibles. En este caso, Kracie ya tiene un gran punto a su favor y es que, en realidad, es una submarca de Kanebo, pero en versión low cost.
Este limpiador viene en tres formatos diferentes ( limpieza, limpieza profunda y limpieza para desmaquillar) y en olores como el aloe vera, té verde, granada o melocotón, que hacen del momento de la limpieza una delicia, evitando un poco esa pereza que suele provocar, en especial por las noches.
La textura es un tanto especial, ya que tiene consistencia de crema espesa y suave, como si fuese una pasta de dientes, pero que al aplicar una pequeña cantidad sobre la piel, previamente humedecida, se va formando una espumita que te deja algo similar a una máscara en la cara. Después, con movimientos circulares y agua más bien caliente se va eliminando para acabar con agua fría que cierra el poro y deja la piel tersa.
La limpieza que se nota es superior, con diferencia, a cualquier limpiadora que haya probado antes y la sensación de frescor que deja, es un lujo para los sentidos, más aún en estas fechas.

2- Aceite de Monoï
Si hay algo que me recuerde profundamente al verano, a los días de playa, al sol de las tardes, a las noches que parecen infinitas, es el olor a flores de Tiaré y el de coco.
Este aceite, es una mezcla de los dos olores, creando el perfecto olor veraniego que recuerda a algo tropical; no deja la sensación pringosa típica de los aceites porque es de los denominados secos y tiene diferentes usos.
Se puede aplicar para después de la ducha, como hidratante, para el pelo, para tomar el sol...
Deja la piel suavísima y el pelo nutrido y brillante y el olor... mmmm! es algo delicioso!
3- Bronceador en crema de Too faced
Ya en otra entrada sobre el cuidado de la piel os conté la importancia de protegerse la piel ante las radiaciones solares, así que no tengo ningún tipo de reparo en reconocer que ese es un tema que me tiene bastante obsesionada en mi día a día; soy de piel bastante blanca y reactiva al sol, así que procuro mantenerme un poco alejada de este y tomar toda precaución posible si me expongo a él, así que muchas veces me veo la cara sin vidilla, pálida, y no siempre es algo que me guste.
Pero hoy en día no hay nada que no tenga remedio en estos temas. Mi última adquisición ha sido un bronceador de Too faced en formato crema que, además de no ser nada pesado ni incómodo porque se funde enseguida con la piel, dándole un aspecto jugoso y de buena cara, dura bastante más que uno en formato polvo y no marca para nada los poros
4-exfoliante de menta
Llevas todo el día en sandalias, caminando de aquí para allá, soportando el calor del ambiente y del asfalto y  la piel de tus pies se resiente. Se resecan, salen durezas, grietas, la circulación sanguínea empeora haciendo aparecer esos molestos síntomas de pesadez...

Pues no hay nada mejor en el mundo entero ( y esto lo digo hasta con emoción) que el exfoliante de menta para pies de The Body Shop.
 De granulo medio y olor a menta fresca, este exfoliante calma, refresca y da vida a los pies que han sufrido después de un largo día, dejándolos casi nuevos. Juro que esto puede llegar a salvarte la vida después de largas caminatas veraniegas.
5- Eclat du jour de Clarins

Si de todas las cremas hidratantes tuviese que escoger una, sin duda me quedo con esta. Ahora ya hace un año y algo que la llevo usando y es una maravilla. De textura en gel y rápida absorción, es la hidratante ideal para pieles jóvenes y mixtas, ya que aporta la hidratación necesaria para nuestra piel sin llegar a engrasarla y dando, además, un aspecto más luminoso y jugoso. Y el olor me recuerda tanto al verano, que no creo ser capaz de utilizar otra cosa que no esa esta crema para hidratarme la cara. 
6- Bálsamo labial de cereza
Es solo pensar en este cacao labial y acabar siendo transportada inmediatamente a los veranos de mi infancia. Ese sabor a cerezas, ese efecto de labio mordido que deja... y todo protegiendo los labios y dejándolos perfectamente hidratados para esos besos de las noches de verano.

Y por ahora, estos han sido mis seis pequeños tesoros sin los que no puedo vivir y que tal vez os ayuden a encontrar vuestros favoritos, también. Seis tesoritos que me hacen la vida más fácil y más feliz, aunque sea en pequeñas dosis.