Obras maestras de la Phillips Collection

He podido disfrutar de la magnífica exposición titulada "Impresionistas y Modernos" de la Phillips Collection que se celebra en Caixa Forum de Barcelona. Esta colección de pinturas fue iniciada en Washington y creada por Duncan Phillps (1886- 1966), joven amante del arte y crítico que apostó por reunir en su colección, además de los naturalistas del románticismo de la primera mitad del siglo XIX, los impresionistas más destacados y los artistas de las nuevas vanguardias del siglo XX de los que él mismo fue contemporáneo. Su gran mérito, a mi juicio, fue la gran visión profética en adquirir obras de artistas que posteriormente fueron considerados los más grandes entre toda esta gran variedad de movimientos pictóricos que evolucionaron en la primera mitad del nuevo siglo. El museo de la colección Phillips Collection abrió las puertas al público en 1921 y fue en su momento pionero en la adquisición de obras de grandes artistas europeos y de inovadores pintores modernos norte-americanos, siendo uno de los centros más importantes en la vida cultural norteamericana.

La exposición esta repartida en seis salas cada una de las cuales representa en orden cronológico las diferentes obras que fue adquiriendo este profético coleccionista. Encontramos la primera sala de los naturalistas y románticos algunos paisajes maravillosos Courbet. A destacar también dos obras de Daumier, "El levantamiento" inspirada en la revuelta de 1848 contra Louis Felipe, impresionante el grito ardiente de un joven que entre la masa oscura del gentío reivindica la opresión que sufren las clases proletarias.

En la sala de los impresionistas a destacar un espléndido autorretrato de Cézanne y unas bailarinas de Degás que si bien parece casi esbozado es una obra de grandes dimensiones, sobria pero atrevida en su composición; el juego de sus dos complementarios, el naranja y el azul, la convierten en una pieza de gran modernidad innovadora. Especialmente representado Pierre Bonnard con varias obras, a destacar "Chicas con gato", con esa destreza de pequeños trazos multicolores que hacen vibrar la ternura de las miradas de las jóvenes retratadas.

Una pieza que me impresionó fue el jarrón con flores de Monticelli, de una rabiosa pastosidad matérica que obviamente hay que ver del natural. Por cierto, un artista bastante desconocido del que Van Gogh, de una generación posterior, fue un gran admirador.

Siguiendo el itinerario en orden cronológico Picasso y Matisse nos asombran con su modernidad, su inventiva y su creatividad. De Picasso destacaría dos obras de diferentes épocas, "La Habitación azul" de su época azul, de tonos fríos y monocromos pero de rico cromatismo matérico y "Mujer con sombrero verde" de factura más clásica pero de gran expresividad y modernidad en su concepción de la perspectiva deformada. Matisse, con su "Interior con cortina egípcia" en el que los colores planos sin sombras nos cautivan como si se tratase de un bello tapiz. También una obra de Dufy, "Joinville", me pareció sensacional; con una serie de aguadas de diversas tonalidades de fondo y unos trazos negros muy vigorosos nos deleita con una preciosa vista de Nogent sur la Marne.

Modigliani también está representado con un retrato de su amiga Helena, que tantas veces le apoyó en su necesidad. Chiam Soutine, otro gran desconocido, amigo de Modigliani, nos sorprende al estilo Monticelli con su "Faisán" de fuerte expresividad y pincelada agresiva de gran empaste. Hay que verlo al natural.

Para terminar, excelente el cubismo de Braque con su interior con silla amarilla, con ese rico color negro de fondo que parece que tiene color en su contraste con el amarillo ¡Qué despliegue de creatividad, sobriedad y belleza en una obra casi abstracta! También, para los amantes del expresionismo más abstracto la obra de Pollock y Rothko, entre otros, culmina la gran visión de modernidad de este gran visionario que supo reunir esta matravillosa colección de obras inmortales.

¡No os la perdáis!