Ólafur Arnalds - ...And They Have Escaped The Weight Of Darkness (2010)

Texto: Samuel
Con veintipocos años y cinco discos a sus espaldas, Ólafur Arnalds se ha convertido en el nuevo chico prodigio de la escena neoclásica.
Tras “Eulogy For Evolution” (2007), “Variations Of Static” (2008), “Dyad 1909” (2009) y “Found Songs” (2009), este último disco continúa con su constante evolución. En esta ocasión vuelve con un sonido más maduro, más estilizado, más equilibrado. Parece que ya no busca tanto el recurso del crescendo fácil. Ahora es como si dejara reposar más la melodía, como si la dejase crecer por sí misma, a su ritmo. En cada disco está ganando en consistencia, en intensidad.
El armazón de su música es el piano, presente en toda su discografía, unido a envolventes arreglos de cuerda -violines y cellos- y algún que otro guiño post-rockero, no olvidemos que también forma parte de un grupo de hardcore metal. Pero en su último trabajo añade otros instrumentos, como la batería y un puñado de bits electrónicos que, por momentos, llegan a tomar el protagonismo. Piezas como “Tunglið”, “Gleypa Okkur”, “Hægt, Kemur Ljósið” o “Þau Hafa Sloppið Undan Þunga Myrk” son claros ejemplos de ello.
Su sonido se ha comparado mucho con el de Sigur Rós -no en vano son de la misma ciudad islandesa, Mosfellsbær, y han compartido escenarios en varias ocasiones, el uno como telonero, los otros como artistas principales-, pero quizá esté más cercano a la órbita de artistas como Craig Armstrong, Max Richter o Jóhann Jóhansson, con el que comparte también nacionalidad. Joder, ¿qué tendrá Islandia?
En definitiva, un disco que, sin salirse de lo clásico -un clásico contemporáneo, revitalizado-, tiene ingredientes que van desde el post-rock hasta la música ambiental, aderezado con ciertos toques de banda sonora. Una buena combinación cuando se complementan de una forma tan natural y con tanto gusto.
“...And They Have Escaped The Weight Of Darkness” se escucha con los ojos cerrados, la mente en blanco y con la predisposición a dejarse llevar. Así que, a todo aquel que se aventure, buen viaje.
"Hægt, kemur ljósið"