Omega, revolución, 15M

A mediados de los 90 un disco de otra dimensión irrumpió en la música popular española, ese disco era "Omega". El maestro Enrique Morente y los apabullantes Lagaratija Nick junto a un grupo de colaboradores hicieron realidad la fusión imaginada, y crearon una cumbre a la que de momento nadie más se ha atrevido a llegar.
El 15M por su lado consiguió hace unos meses una cumbre parecida pero en otro territorio distinto de la cultura. En esta ocasión no fueron unos genios de la música los que se juntaron para crear algo, sino un montón de ciudadanos que del mismo modo que Morente y Lagartija querian ir un paso más allá.
Las similitudes metaforicas entre la publicación de Omega y la salida a la calle de los ciudadanos en nuestro mayo particular, arrancan desde el mismo espíritu: "La creencia de conseguir nuevas metas, de alcanzar territorios inexplorados" unos en la música otros en la política.
La incomprensión por parte de los supuestos expertos de las materias correspondientes, en uno los puristas del flamenco, en el otro la clase política, es otro nexo de unión. Y bajo mi punto de vista espero que el 15M tenga un futuro similar al de Omega, que a pesar de no ser un super ventas está reconocido como uno de los mejores discos de la historia reciente, y su influencia es de un calado muy profundo.