En cuanto a packaging es mi favorita sin duda de las tres y, esto es inevitable porque al menos a mí, su color rosa y sus sombritas en forma de corazoncitos me han conquistado desde el primer momento.
El packaging exterior sí que es muy en la línea de las otras dos Chocolate Bar y por la parte trasera nos da información de la paleta y de las 16 sombras que contiene:El packaging interior es del mismo grosor y tamaño que la segunda edición de las Chocolate Bar, es decir, el más fino y en esta ocasión la paleta de chocolate (rosa) tiene relieves de corazones:
Su cierre es magnético y al abrir la paleta nos encontramos con la forma clásica de la Chocolate Bar. Un espejo mediano y 16 sombras de las cuales 2 tienen un tamaño mayor.
Contiene alguna sombra que se repite en antiguas paletas de Too Faced, pero la gran mayoría son sombras nuevas, aún así, no tiene sombras repetidas de las paletas Chocolate Bar y las que se repiten, Satin Sheets que se encontraba en la paleta Boudoir Eyes o Mocha que también existe en sombra individual, me parecen muy acertadas.
En cuanto a las sombras sólo puedo decir que son absolutamente maravillosas. Too Faced sigue apostando por la fórmula con cacao y aroma a chocolate que tantísimo ha triunfado, entre sus ingredientes también se encuentra la vainilla y lo que nos encontramos es una paleta de sombras muy cremosa, muy pigmentada a excepción de 3 sombras mate que son igualmente muy pigmentadas pero de textura más seca.
En cuanto a la elección de los colores me parece 100% acertada, Me gustan todas las sombras, no hay ni una sola que no me guste. Aunque tengan forma de corazón contienen la misma cantidad de producto que las anteriores, 1g cada una.
Me parece una paleta súper versatil para crear cualquier tipo de look y si las sombras ya son bonitas en el pan, los swatches son para enamorarse:
Podemos utilizar Almond Truffle, Cashew Chew y Pecan Praline para la cuenca, Cotton Candy para el párpado móvil, Satin Sheets para iluminar el lagrimal o el arco de la ceja y Dark Truffle para dar profundidad en la V externa.
Cafe au Lait y Totally Fetch se pueden utilizar por ejemplo para el párpado móvil, Sprinkles para iluminar y Bourdeaux y Earl Grey para dar profundidad o hacer un ahumado.
Divinity la podemos usar para iluminar en un look de día, Mocha como sombra de transición en la cuenca, Malted en la V externa para dar profundidad y Molasses Chip y Black Currant como sombras en el párpado móvil.
Una de las cosas que más me han gustado de esta paleta es que todas las sombras combinan entre sí, a pesar de haber tonos fríos y cálidos, pudiendo crear looks de contraste o más llamativos y looks complementarios, en la misma gama de tonos, más discretos.
La paleta tiene un precio de 45€ y la podéis comprar en Sephora. Me parece una paleta de muy buena calidad y en la línea de las dos anteriores. No hay ninguna sombra que decepcione y además me ha gustado que no sea para nada una copia de la Naked 3.Al ir en la línea de los rosas, Too Faced lo tenía fácil si hubiese ido en la línea de la Naked 3, sin embargo, han querido hacer una paleta única y alejada de la Naked 3, pero al mismo tiempo buscando los rosados/neutros.También me parece un acierto que incluya una sombra violeta y otra rosa fucsia. La paleta tiene tanto sombras mate como satinadas y metalizadas. Algunas tienen pequeños destellitos de purpurina apenas apreciables, pero ninguna que tenga excesivo glitter.Es una paleta muy versátil para utilizarla tanto en looks de día como de noche y se merece un 10. Os dejo con el vídeo para que os terminéis de decidir si invertir en ella o no:
¿Qué opináis de esta paleta? ¿Os gustan las Chocolate Bar?
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