Dicen que el pan más fácil de hacer del mundo es el pan de soda. Y es cierto. Básicamente se hace en dos pasos: mezclar y hornear. Apenas requiere amasado, ni fermentación, y en cambio el resultado es asombroso: un pan de corteza crujiente y una miga enorme. Es el pan irlandés. Ya me imagino a los antiguos mineros irlandeses alternando pedazos de este pan y jarras de cerveza casera...
Ingredientes :- 300grs harina. - 200grs harina integral.- 1 cucharadita de sal.- 1 cucharadita de bicarbonato sódico. - 1 cucharada de azúcar. - 320ml buttermilk (=300ml leche + 20ml vinagre).
Pues como he dicho antes, este pan se hace en dos pasoa muy sencillos, mezclar y hornear. De manera que mezclaremos los ingredientes secos (los dos tipos de harina, la sal, el azúcar y el bicarbonato) y a continuación añadiremos el buttermilk.
Ya sabes que los que no disponemos de estos ingredientes tan comunes en el extranjero los tenemos que hacer en casa... Mezcla la leche con el vinagre (puedes usar zumo de limón) y deja reposar 15 minutos: listo tu buttermilk casero.
Amasa ligeramente hasta que le puedas dar forma de bola. Coloca la bola de masa en la bandeja y haz un corte en cruz en la parte superior del pan, e introducelo en el horno a 180°C unos 30 minutos (la temperatura y el tiempo ya sabes que es un mundo en cada horno... la corteza debe quedar bien dorada...).
Ya sólo te queda servir y devorar este delicioso pan.