Revista Cultura y Ocio

Pandora. Henry James

Por Mientrasleo @MientrasleoS
Pandora. Henry James
     "Desde hace tiempo es habitual que los barcos a vapor de la North German Lloyd, que transportan pasajeros de Bremen a Nueva York, fondeen durante unas horas en el tranquilo puerto de Southampton, donde el cargamento humano recibe considerables adiciones. Hace algunos años, un joven y despierto alemán, el conde Otto Vogelstein, dudaba sobre si censurar o aprobar dicha costumbre. Apoyado sobre la barandilla de cubierta del Donau observaba con curiosidad, tedio y desdén, a través del humo de su cigarro, cómo los pasajeros americanos (la mayoría de los viajeros que embarcan en Southampton son de dicha nacionalidad) cruzaban el pantalán y eran engullidos por la enorme estructura del barco, dentro de la cual tenía el conde la reconfortante certeza de tener un nido propio."
     Decir a estas alturas que me gusta Henry James, es repetirme. Pero es así de simple, me gustan sus pequeños universos y como nos cuenta la mitad de lo que entendemos en sus letras. Por eso pocas veces me resisto mucho tiempo a sus obras cuando veo que se editan. Y por eso también, adquirí el libro que os enseño hoy, porque hoy traigo a mi estantería virtual, Pandora.
     Conocemos al conde Otto Vogelstein cuando viaja a Estados Unidos para tener allí una carrera diplomática. Durante el viaje de ida, en el barco, conoce a una joven llamada Pandora que llama su atención, de familia de bajo nivel, la joven sin ser espectacularmente hermosa tiene un desparpajo que lo deja sorprendido. Tiempo después, ya en Washington, vuelve a encontrarse con esta mujer. Para su sorpresa no sólo ha ido escalando puestos en la sociedad, sino que conoce incluso al presidente. Y sus armas parecen seguir siendo las mismas que hicieron que él se fijara en ella durante aquel trayecto en barco.
     Estamos ante una novelita corta que se diferencia de las últimas obras de James principalmente en el tono. Es una obra irónica a grandes ratos y divertida en la que representa el cambio del rol femenino en la sociedad en el siglo XIX. La mirada del conde ya en el barco, escudriñando los distintos estratos sociales desde su posición claramente superior, la forma en que se fija en la familia Day y como se ve sorprendido por esta joven, son un placer para los ojos del lector que se encuentra sonriendo ante alguna de las apreciaciones casi maliciosas que realiza.
     Pero no será hasta su reencuentro que nos demos cuenta del verdadero motor del libro: los cambios. Cambio entre la sociedad europea, clásica y aposentada, magníficamente dibujada en el personaje de Otto, y la norteamericana, fresca, joven y en constante movimiento, como Pandora. Y es que Pandora es muchas cosas como nos queda claro por las distintas observaciones que recibimos, pero sobre todo es sorpresa, enigmas y magnetismo.
     Y además mujer, lo cual la convierte en un enigma aún mayor porque se sale de los roles establecidos hasta el momento en la sociedad para el sexo femenino. Imaginaos al pobre conde...
     Incluso nosotros, los lectores, no podremos evitar caer rendidos a sus pies tal y como nos la dibuja James.
     Jovencita americana se mete en el bolsillo a conde europeo, podría rezar un resumen mínimo de esta historia. Sin embargo eso sería tremendamente injusto para esta pequeña joya de la literatura. Si tenéis opción, no dejéis de acercaros a la obra de James. Sus personajes tienen algo que hace que nos parezcan especiales.
     Y vosotros, ¿con qué libro comenzáis la semana?
     Gracias

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