Revista Cuba

Paren la Huelga de hambre porque los necesitamos vivos

Publicado el 28 julio 2016 por Yusnaby Pérez @yusnaby
HuelgadeHambre

Hace ya una semana que Guillermo “Coco” Fariñas se encuentra en huelga de hambre exigiendo del gobierno de Cuba que cese la represión a los cuentapropistas, las golpizas y que cumpla sus propias leyes. Como es natural, su salud se ha ido deteriorando poco a poco. También se encuentran en huelga de hambre un grupo de jóvenes de la UNPACU, la combativa organización que lidera José Daniel Ferrer.

El uso de huelgas de hambre como elementos de protesta pacífica consiste en abstenerse de ingerir todo tipo de alimentos que alguien realiza voluntariamente con el objetivo de llamar la atención sobre alguna situación en particular. Cuando una persona realiza una huelga de hambre, su salud se va deteriorando poco a poco, y si la huelga no se detiene o se le fuerza a recibir alimentación, normalmente el epílogo es la muerte. Guillermo Fariñas tiene una complexión delgada..

Entre los años  40 y 750 BC  en la India se practicaba la llamada “sitting dhaarna” en las que una persona ayunaba a la puerta de un ofensor. Esta práctica fue abolida en 1861 por el Gobierno Británico. También en la Irlanda pre-cristiana, un ayuno llamado “troscah or cealachan” se utilizaba para protestar contra injusticias. También se practicó en la antigua Roma.

Muchas personas conocidas han realizado huelgas de hambre, entre ellas Mahatma Gandhi, Golda Meir, Evo Morales, Antonio Ledezma, Ingrid Betancourt, Daniel Ceballos, Leopoldo López y muchos más. El mismo Guillermo Fariñas se ha declarado 23 veces en huelga de hambre, la última de ellas en 2010.

Hay registros de personas que han fallecido como consecuencia de huelgas de hambre. El Alemán Holger Meins murió en 1974 después de una huelga de hambre que lo llevó a pesar solo 42 kg. A pesar de medir 1.82. También han fallecido el venezolano Franklin Brito Rodríguez en 2010. Muchos Irlandeses han muerto realizando huelgas de hambre contra el Gobierno Británico. Y no podemos olvidar el caso de nuestro Orlando Zapata Tamayo quien murió el 23 de Febrero de 2010 después de una huelga de hambre que duró 80 días. Oficialmente la muerte por huelga de hambre es considerada un suicidio, ya que es la propia persona la que decide abstenerse de ingerir alimentos, sabiendo que eso puede llevarla a la muerte.

Cuando se comienza una huelga de hambre, en una primera etapa que dura de tres a cinco días, el organismo consume las reservas de energía  que ha almacenado en forma de Glucosa almacenada en el hígado y en los músculos. Después comienza una segunda etapa en la que mediante un proceso llamado Ketosis el hígado comienza a procesar la grasa corporal. Pasadas tres semanas, el cuerpo comienza un proceso de Inanición en la que se van minando los músculos y los órganos vitales en búsqueda de energía. Se empieza a perder médula ósea y la vida comienza a estar en riesgo.

Después de unos cincuenta días, el deterioro es mayúsculo, se pierde la movilidad y la consciencia porque falta energía. La inanición causa la muerte por falta de irrigación cerebral o debido a un fallo cardíaco. Yo no quiero que eso le pase a Guillermo Fariñas ni a ninguno de los patriotas huelguistas.

Admiro la osadía de Fariñas, los jóvenes de UNPACU y otros, que se atreven a retar al régimen poniéndose en huelga de hambre para tratar de lograr concesiones que sólo se lograrían por humanidad, ya que supuestamente el régimen cedería para evitar la muerte de las personas. Sin embargo, un gobierno como el castrista no le da ningún valor a la vida de las personas. Es un gobierno represivo y totalitario que incluso no vacila en matar personas. Las probabilidades de éxito son muy reducidas y será muy difícil que se logre algo de esa manera. Lo que están arriesgando es su salud, están cometiendo un suicidio.

Fariñas y los jóvenes de UNPACU son patriotas de valía y Cuba los necesita sanos y fuertes. Por eso yo les pido que abandonen la huelga de hambre a la brevedad posible. También invito a otros cubanos a que les soliciten lo mismo.

Los admiramos, los necesitamos y los queremos vivos.


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