Revista En Femenino

Parteras tradicionales en Brasil

Por Pequelia @pequelia

Madre indígena

En Brasil viven casi medio millón de indígenas, distribuidos en 215 grupos étnicos, lo que representa un 0,25% de la población nacional. Para atender sus necesidades específicas en cuanto a salud materna, el grupo feminista Curumim ha creado el proyecto “Parteras tradicionales”, que respeta las tradiciones indígenas al procurar atención médica a las mujeres embarazadas.

Según Paula Viana, directora de la organización, existen “vacíos” en el sistema de salud indígena, que tratan de rellenar entrenando a parteras y profesionales sanitarios.

En palabras de Silvia Angelice de Almeida, técnica del Departamento de Salud Indígena de la Fundación Nacional de Salud (Funasa), se trata de “cuidados interculturales”, que tienen en cuenta la medicina natural y la figura de los sanadores, los chamanes y las parteras tradicionales.

Tanto durante el embarazo como en el parto, cada pueblo indígena tiene sus propias costumbres; por ejemplo, algunas etnias consideran que la placenta debe volver a la comunidad después del parto; para otras, es importante que su gente nazca y muera en su tierra, y en algunos pueblos, la persona encargada de amamantar inicialmente al bebé es la abuela, ya que las madres no pueden dar su primera leche o calostro al recién nacido.

El programa de salud materna de Funasa ha sido ideado por antropólogos, sanadores tradicionales, parteras y jefes espirituales indígenas. El personal sanitario suele acudir una vez al mes por cada aldea, con el objetivo de garantizar “un sistema de salud de calidad a nivel nacional”.

Este programa también tiene en cuenta la dimensión espiritual de las enfermedades, trabajando en conjunto la cura espiritual y el lado físico.

El programa de salud materna incluye otros temas que afectan a las mujeres, como la prevención del cáncer de útero y del cáncer de mama, y de enfermedades de transmisión sexual como el sida y la sífilis, e incluso problemas de violencia doméstica.

Los datos de Funasa revelan que desde 1999 la mortalidad infantil entre los indígenas se ha reducido en un 40%. Sin embargo, las muertes infantiles a causa de infecciones digestivas y respiratorias son mucho más elevadas que en el resto de la población.

Vía | Periodismo Humano

Foto | Carlos Ebert


Volver a la Portada de Logo Paperblog