Revista Cine

Películas desconocidas para el gran público y que recomiendo ver (Toma 5)

Publicado el 01 abril 2015 por Lo Que El Cine Se Llevó @elcinesellevo

Vive como quieras (1938)

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Una obra maestra –Oscar a la mejor película en 1939- que cuenta con el inconfundible sello de Frank Capra. ¿Son felices? Háganse ésta pregunta y piensen bien la respuesta porque seguro que después de ver la película más de uno lo dudará. James Stewart y Jean Arthur forman la pareja perfecta en ésta comedia divertidísima que pone en jaque nuestra forma de vivir y pensar y que supone todo un chute de optimismo.

La Loba (1941)

 

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Otra obra maestra del gran William Wyler. Fue quizás un poco eclipsada en 1941 por obras como Ciudadano Kane y Qué verde era mi valle, pero la atormentada historia de esta familia remueve la conciencia. Una colosal Bette Davis ofrece un recital interpretativo en el papel de la malvada hermana que hará todo lo posible por quedarse con la herencia familiar. Algunos momentos son tan indignantes que la odiarás para siempre.

Furia (1936)

 

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Joe Wilson es encarcelado por un delito que no ha cometido. Con esta premisa, Fritz Lang (en su primer largometraje americano) pone a debate la presunción de inocencia y las intenciones que puede llegar a tener un ser humano cuando la ira y la venganza se apoderan de él. Spencer Tracy –atención al cambio interpretativo durante el film- y la angelical Sylvia Sidney protagonizan este thriller que fue nominado al Oscar como mejor historia.

El ultimo refugio (1941)

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Una de las mejores películas de Raoul Walsh y la que consagró a Humphrey Bogart como estrella. Con la narrativa clásica del género y un ritmo bastante ágil; el amor, los atracos y las persecuciones se dan cita en este thriller de cine negro que cuenta con una antológica secuencia final en las montañas.

El enemigo público (1931)

 

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Otra película de cine negro en la que James Cagney hace gala de su particular carácter interpretativo. Cuenta la historia del ascenso de un joven criminal gracias al negocio del alcohol en plena ley seca y en la que el poder y el dinero serán sus peores enemigos. Destaca una dirección que utiliza hábilmente el fuera de campo debido a la censura. El final da buena muestra de ello.


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