Pintauñas con naturalidad

Desde muy antiguo existe la costumbre de pintarse las uñas, los egipcios con henna, los romanos con extractos vegetales y en china la realeza con polvo de oro.En los últimos años los esmaltes de uñas tienen popularidad por sus colores y efectos, nos dan un aspecto cuidado de nuestras manos, pero no debemos abusar de ellos y tener en cuenta que hay que tomar precauciones.

El esmalte para ser perfecto queremos que se extienda bien, que no gotee, que forme una película uniforme, que se seque rápido y que se mantenga. Pero esta composición necesita un ingrediente, un disolvente, que ha de evaporarse rápido para que la laca se seque y aquí entran en acción el “tolueno”, los “ftalatos” y el “formol. Esos son los componentes que debemos evitar. Así que, al elegir nuestra laca de uñas se aconsejan las marcas que no contengan estas sustancias que demuestran su toxicidad.
Estas sustancias nos pueden provocar con el tiempo, alergias dermatológicas, problemas respiratorios, mareos y vómitos por ingestión, incluso pueden acumularse en el hígado. Todo estos al llevarnos las manos a la cara, y sobre todo, a la boca y los ojos, zonas muy sensibles. Al acercarnos con la cara para pintar las uñas aumenta el riesgo de inhalación por estar demasiado cerca del producto, y por tanto el riesgo de efectos perjudiciales en el organismo. Os recomendamos algunos remedios caseros sencillos:Las uñas crecen lentas, las de las manos tardan medio año en desarrollarse del todo, y las de los pies alrededor de un año y medio. Por ello, deberemos ser constantes en sus cuidados si queremos lucirlas bonitas.·   Podemos sumergir las uñas en aceite de almendras tibio durante diez minutos, esto las nutrirá y fortalecerá.·   Si añadimos unas gotas de naranja al aceite de almendras les aportaremos además elasticidad y brillo.·   Para eliminar las pieles muertas de alrededor de las uñas podemos realizar un ligero peeling usando el aceite de almendras con algo de azúcar.·   Si queremos lucir unas uñas sin manchas podemos mezclar levadura en polvo y zumo de limón.·   También podemos pulirlas con una lima y sacarles un brillo similar al de un esmalte.El esmalte es un producto insoluble al agua y se necesitan quitaesmaltes potentes, como la “acetona”, seca las uñas, elimina la grasa, la de la piel que entre en contacto, y su olor es tan fuerte que puede llegar a ser irritante. Os proponemos alternativas naturales:·   El “lactato de etilo”, es natural y biodegradable, no maltrata la uña y si lo mezclamos con aceite de ricino, puede protegerla.El mejor consejo es intentar dejar las uñas sin pintar al menos un par de días a la semana para dejarlas traspirar, y así las luciremos fuertes y bonitas.Esperamos que estos consejos os ayuden a innovar, y a ser más conscientes que debemos “mimar” nuestro cuerpo y a no exponerlo a sustancias, que por estar en el mercado, no son beneficiosas a la larga para nosotras.
   Caty Soler