ANTONIO CRUZ
La biología humana confirma que una mujer sana podría llegar a tener alrededor de una veintena de hijos durante los años fértiles de su vida.
De hecho, algunas familias pertenecientes a la generación de nuestros abuelos, que no estaban sujetas a ninguna regulación de la natalidad, alcanzaron un número de descendientes que se aproxima a esta cantidad máxima. Una tal realidad biológica sugiere la necesidad de un adecuado control de los nacimientos por parte de los progenitores.
Puede leer aquí el artículo completo de este escritor y biólogo, de fe evangélica, titulado Planificación familiar responsable