Una estría se define como un adelgazamiento de la epidermis con rotura y retracción de las fibra elásticas.Nos pueden aparecer en los muslos, glúteos, abdomen y senos. Para entender mejor el tratamiento, debemos comprender bien lo que realmente le ocurre a nuestro cuerpo.
A nivel de la estría existe una profunda modificación de la síntesis de estas moléculas: proteoglicanos (contienen ácido hialurónico), glicoproteínas de estructura, colágeno y elastina.
De esta manera el espesor de la epidermis se ve disminuido y por tanto el aporte de estos activos o precursores de los mismos, bajo una buena fórmula cosmética, va a contribuir positivamente a la prevención de la aparición de estrías.
Existen tres tipos de estrías:
1) Estrías de distensión: frecuentes en personas obesas sometidas a adelgazamientos repentinos.
2) Estrías atróficas: frecuentes en atletas y deportistas con severos entrenamientos.
3) Estrías de gravidez: típica de mujeres gestantes y debidas al estiramiento de la piel y cambios hormonales.
A nosotras las que nos preocupan son este último tipo. Las estrías afectan a un 50% – 70% de las mujeres embarazadas.
Además de depender de la predisposición de cada persona, en el embarazo influyen dos causas principales:
1) Se produce un engrosamiento e incremento de peso. Si nuestros tejidos tienen poca elasticidad, esta distensión temporal pasará factura y aparecerán las temidas estrías.
2) Factores hormonales: durante el embarazo producimos una gran cantidad de unas hormonas llamadas progestágenos, éstas inhiben la formación de colágeno por lo que favorecen la formación de estrías.
¿Cómo evitarlas?
En el proceso de formación de estrías diferenciamos dos fases:
1) Fase inflamatoria: color rosa pálido.
2) Fase cicatricial : color blanco nacarado.
Su evolución en ausencia de una terapia adecuada es hacia el empeoramiento progresivo.
Una estría en fase cicatrizal no tiene una solución que no implique el paso por un quirófano. En su fase inflamatoria, como bien indica su color rosa, aún tienen aporte sanguíneo, por tanto pueden regenerarse con la ayuda de un tratamiento adecuado.
Nunca se va a regenerar totalmente ya que es tejido roto, pero aun así, los últimos avances en cosmética nos han permitido desarrollar los principios activos más eficaces y específicos para este problema y podemos llegar a regenerar hasta un 80% del tejido, que ya es bastante. La mayoría de nosotras empezamos a actuar en el momento en que vemos los primeros signos de alarma, pero cuando se trata de estrías, no podemos permitirnos esperar tanto.Lo ideal y lo más eficaz a nivel cosmético es evitar que aparezcan utilizando un tratamiento preventivo. Es decir, tener nuestros tejidos y nuestro cuerpo bien preparado para este gran cambio.
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