Últimamente ha saltado a la palestra el tema de dar el pecho en público, lo cual ha causado gran revuelo con opiniones muy dispares. Hay personas que la defienden y otras que no. Yo soy una de las que la defienden sin duda alguna.
Hace poco ví este vídeo y me pareció una absoluta vergüenza ver como hay personas, fundamentalmente hombres aunque también alguna mujer, que califican el hecho de dar el pecho en público como repugnante, asqueroso, pero eso sí, les encanta mirar escotes con grandes pechos.
Dar el pecho en público se podría calificar de mil maneras menos como repugnante o asqueroso. Estamos locos o qué???. ¿¿Qué mente sucia tiene la gente??
Lo lógico, y lo que debería ser, es que el bebé tome el pecho donde le haga falta, independientemente de si es en casa o en la calle. A ver si ahora las madres que den el pecho no van a poder salir de casa por no ofender a nadie... Manda narices!!!
El problema radica en que actualmente, el pecho es percibido como objeto sexual, muchas mujeres no dan el pecho en público a sus bebés porque les incomoda que las miren, pero no con ternura y naturalidad, sino de manera obscena o con miradas de asco. Y al final se acaban tapando con una muselina por vergüenza o por no incomodar a las personas que están a su alrededor.
Que quede bien claro que quién no vea el hecho de dar el pecho como algo natural, tierno, necesario, es un ENFERMO MENTAL y debería recibir tratamiento YA o al menos abstenerse de dar su opinión a las madres y, por supuesto, evitar esas miradas inquisitorias.
Y es que parece mentira que en estos tiempos que corren donde el topless está bien visto, la tela de la ropa escasea y las mentes son más abiertas, exista todavía gente que se escandaliza o incomoda por ver a una madre dar el pecho en público.
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