Revista Blog

¿Practicas la multitarea? Estás exprimiendo tu cerebro de mala manera

Por Lorena White @lorenagwhite

No te preocupes, ocúpate.

¿Recuerdas ese anuncio de un coche que a algunos les pareció sumamente estúpido? Ese de “cuando corras, corre. Cuando trabajes, trabaja. Cuando descanses, descansaCuando conduzcas, conduce”. Puede que después de este post lo veas de forma distinta.

Existen muchos monstruos en la sociedad moderna. A algunos de ellos nos los señalan en el telediario como “los malos” y nosotros nos damos por satisfechos. Pero no son, ni de lejos, todos los monstruos que existen.

Hay ciertos monstruos que no ves (estos son los peores) o que incluso están “bien vistos” por la sociedad, aunque al individuo le mine, le anule y le haga sentirse inseguro, insatisfecho e inútil.

Uno de esos monstruos, que ha proliferado en los últimos tiempos a base de móvles de última generación y trabajo online, es la llamada multitarea. O lo que es lo mismo: la capacidad de hacer varias cosas a la vez.

¿Practicas la multitarea? Estás exprimiendo tu cerebro de mala manera

Yo convivía día a día con el monstruo de la multitarea no hace tanto. Pensaba que, haciendo varias cosas a la vez, iba a ser más productiva, más eficaz, más rápida. Y todo eso mola, sobre todo de cara a un trabajo en el que se buscan resultados en el menor tiempo posible.

El problema viene después, cuando te das cuenta que, con tanta tarea simultánea, lo que queda de tu cerebro al final del día es una especie de zumo. Hoy te vengo a contar lo bueno que es hacer una cosa cada vez. 

¿Haces multitarea?

Es probable que nunca te hayas parado a pensar en si tú haces multitarea, porque en realidad la llevas a cabo sin darte cuenta. Pero en realidad es más común de lo que crees y tú también lo haces. Por ejemplo, seguro que casi todos los días, cuando enciendes la tele, te pones a mirar el móvil sin prestar atención al programa o película que están dando. Cuando te pones a trabajar en un proyecto de la Universidad o en una tarea del trabajo o incluso en tu blog, en vez de centrarte al máximo en ello, te dedicas a consultar el mail, a mirar Twitter… Seguro que a veces, cuando hablas con alguien (o más bien, cuando alguien te habla), te pones a pensar en cosas como la lista de la compra o lo que tienes que hacer al día siguiente.

“Hola, soy yo”. Cada día llega y te saluda el monstruo de la multitarea.

Multitarea vs. Una cosa cada vez

Existe un término japonés (ichigo-zammai) que significa “concentración total en un solo acto”. Básicamente, esta práctica habla que es mucho mejor (más productivo y más sano para nosotros) ocuparnos, estar (y ser) en el momento presente cuando realizamos alguna actividad. Y sólo una. Como si aquello en lo que estamos trabajando o lo que estamos haciendo, sea lo único que podemos hacer. Así, cuando uno come, come. Cuando uno hace una tarea concreta, hace sólo esa tarea concreta. Además, este concepto defiende que sólo cuando nos concentramos en una cosa por entero, somos capaces de dar lo mejor de nosotros mismos, de representar nuestra verdadera naturaleza.

Cómo implementar el hábito de hacer una cosa cada vez

Si últimamente sientes que, lejos de conseguir tu objetivo de ser más productivo, rápido y eficaz en lo que haces, la multitarea sólo consigue que acabes agotado, aquí van unos tips rápidos para combatirla y empezar a entrenar el hábito de hacer una cosa cada vez.

  • Establece prioridades: hace un tiempo te hablé de cómo podías ordenar tus prioridades. Realmente hacer una cosa cada vez no significa que vayamos a ser más lentos, sino que le daremos toda nuestra atención a lo que estamos haciendo. Obviamente, esto no quita que no tengamos cientos de cosas que hacer cada día así que lo mejor, será priorizarlas.
  • Cuenta mentalmente: cuando estés trabajando en algo y estés intentando poner tu atención plena en ello, y notes que la mente se te va a otro lado, cuenta hasta diez, y vuelve con tu tarea. Me pasa en el trabajo, cuando estoy haciendo algo y de pronto me salta la notificación de que ha llegado un nuevo mail. Seguro que a ti también te pasa, casi cada día.
  • Realiza anotaciones mentales de cada momento. Intenta sacarle el jugo máximo al momento. Si estás comiendo, esfuérzate por saborear la comida. Si estás trabajando, tómate tu tiempo para estructurar y planificar tus ideas.

Volver a la Portada de Logo Paperblog