Por Dios. ¡En pijama, no! Y, ¡¿tú?! ¡¡¿¿Qué haces desnudo???! OMG. Lo que tengo que ver. Id a vestiros de gala, perdidos y perdidas. Va, que os espero… (Cincuenta largos minutos después) ¡Ohhh, que guapérrisim@s! Agarraros a vuestros teclados y ratones, pues vamos a asistir a la gala de los Premios Maisheros 2012. Para presentar estos premios llamé a Brad Pitt, pero oye, que no me contestó, así que lo haré yo, qué remedio, ni en mis propios premios puedo descansar.
Perdidos, perdidas, muchos han sido las lecturas que nos han acompañado este año. Sentimientos, emociones, aventuras, viajes inesperados y un sinfín de mundos hemos podido conocer en este año que ya se despide tímido, y con un toque engreído. Porque puede, porque quizá no haya sido el mejor año del mundo, pero sí que ha sido un año especial, un año que hemos vuelto a compartir todos juntos unidos por ese hilo invisible que llamamos literatura. Durante todas las lecturas del año, algunos han destacado por encima de otros y vamos a otorgarles sus galardones Maisheros, que no es que yo sea una egocéntrica, que es que los premios son en base a lo que yo personalmente he leído, faltarán muchos que seguro me he perdido y que debería haber leído, pero esos espero conocerlos en el 2013.
Vamos allá, pues.
Este libro siempre lo recordaré con especial cariño, tengo a cada uno de sus personajes tatuados a fuego en la memoria, quizá no sea nada del otro mundo, ni tenga una historia repleta de dragones, amor y princesas, pero es una historia de esas que a mí me gusta tildar de verdaderas, de especiales y de ¿por qué no decirlo? de mágicas. Uno de esos libros que todo su encanto reside en una sencillez muy bien conseguida, una sencillez que no es real, pues tiene todo un entramado de hilos y de historias que hacen que realmente no crea que haya sido una historia fácil de escribir, es una de esas historias en las que se vuelca el alma y lo que no es el alma. Por todo ello y otras cosas que no diré, El Gran Juego encabeza la lista llevándose el primer galardón Maishero, sube a recoger el premio el gran Perotti, seguido de una ovación (venga, que no os oigo ovacionar, venga, no seáis tímidos, si no os ve nadie, veeeengaaa… ¿Ya? Así me gusta)
Otra de esas historias especiales que hay que conocer. Distinta y escrita con inmenso cariño y mimo. Cuando lo empecé no sabía qué iba a encontrarme, ya sabéis que soy una enamorada del amor, y aunque estos libros no tengan un romance clásico y típico de chico conoce chica, sí que contienen amor: amor por otras cosas, cosas que a veces son más importantes. Os animo a conocer a Henry y a cada una de las personas que han pasado por su vida, casi ninguna tiene desperdicio, y sin duda os dejará una pequeña huella, es de esos libros que se recuerdan, que perduran en la memoria y te acarician. Sube a recoger el premio Henry N. Brown con su gran corazón, y aunque no puede hablar, se le intuye en la mirada un gran agradecimiento a todos y cada uno de las personas que se han atrevido a leer su historia y acompañarle por el paso del tiempo. Un gran aplauso para él (aplaudir, leñe, que no os oigo).
Aventuras, una protagonista de armas tomar y una historia que si bien no es el colmo de la fantasía y no ahonda mucho en descripciones, sí que está muy bien contada y tiene unos personajes genialmente trazados junto a un pasado digno de conocer. Licia Troisi me mantuvo atenta a cada una de las páginas que forman este libro y para los que no lo sepáis, os lo digo yo, no soy mucho de fantasía y pocos de este género me han encandilado, este es uno de ellos. Quizá si le preguntáis a alguien más entendido del género os dirá mil mejores, pero estos son los premios Maisheros y mi galardón va para este libro que supo encandilarme y tenerme aquí, esperando a la segunda parte. Por ello sube a recoger el premio Dubhe que aunque da un poco de miedo con todas esas armas, nosotros sabemos que es puro corazón y no podemos hacer otra cosa que hacerle la ola (veeenga, que no os veo mover los brazos, así sí).
Aquí viene mi dilema, me toca entregar el premio a un libro amoroso, de juvenil romántica pura y dura… y estoy dudando. Play, Un beso en París, Obsidian, Esta noche no hay luna llena están entre a los que me encantaría darles el premio, pero mi premio va para…
Si tenemos que hablar de amor pura y estrictamente, este libro es su definición perfecta. Un libro sencillo y quizá no demasiado pretencioso, pero sí un libro real, bonito y dulce con el que disfruté muchisísimo y puse mis caras de enamorada del amor durante toda la lectura. Destacaría de él, por encima de todo, su realismo, su “es posible”, y es que aunque parezca fácil creo que una de las cosas que más me está chocando en las lecturas es precisamente la falta de lo que a este le sobra, el creerme el amor. Con unos protagonistas que quizá no son perfectos, Perkins nos relata una historia de amor que tampoco lo es… y es ahí, en los pequeños detalles y en la imperfección donde, yo creo, reside el amor. Llamadme rara.
Y ahora sí que sí, no quería acabar estos “premios” sin nombrar a algún autor novel, de esos que están ahí, día a día, luchando por su sueño, para que conozcamos su historia y compartamos su secreto. Astralis y Pétalos de Papel son los que más me han gustado, y entre ellos se libra la batalla… pero el premio se lo lleva…
Se quedan sin premio, pero me encantaría dárselo porque sobresalen y encandilan a:
¿Estáis de acuerdo? ¿En desacuerdo? ¿Con ganas de alguno? ¡Os leemos!
Puzzle Bobble
Karate Blazers
Puzzle De Bloques
Magical Cat Adventure