Revista Ciencia

¿puede un milagro demostrar la existencia de dios?

Publicado el 20 julio 2010 por Jesuszamorabonilla
¿PUEDE UN MILAGRO DEMOSTRAR LA EXISTENCIA DE DIOS?
Quedó esta discusión pendiente hace unos días en la entrada sobre "El mejor de los mundos posibles", a propósito de una pregunta de Irichc sobre el milagro del Cojo de Calanda (un típico caso de fraude, que hoy daría, como mucho, para unas pocas apariciones en los reality shows)..Pero, más allá de las razones para aceptar o no el carácter milagroso de ése u otros de los múltiples hechos aducidos a lo largo de la historia como prueba de intervenciones sobrenaturales (reconozco que, personalmente, siento debilidad por la resurrección efectuada por mediación de San Nicolás de Bari de tres niños que habían sido escabechados por un pérfido tabernero, milagro sobre el que la mezquina tradición nos escamotea la respuesta a la pregunta más interesante: ¿seguirían oliendo los chavalillos a vinagre el resto de sus días, u obraría el Todopoderoso en consonancia con su epíteto, y les libraría con generosidad de tamaño inconveniente -no como la chapucera Virgen en el caso del susodicho Cojo, al que no tuvo la decencia de reparar como es debido el cableado neuronal de controlar la locomoción, de modo que el Cojo anduvo unos cuantos días cojeando aun después de haber "recuperado" su pierna pseudoamputada? ), más allá de las razones históricas o forenses para aceptar la verdad de un tal "milagro", creo que es interesante la reflexión siguiente: ¿en qué medida demostraría la ocurrencia de un milagro, certificada fuera de toda duda razonable, la intervención de la divinidad?.Me parece que la única respuesta posible es "en ninguna medida": al fin y al cabo, el "milagro" consistiría en algo que nosotros no somos capaces de explicar, pero que, en principio, no habría problema en aceptar la POSIBILIDAD de que se trate de un fenómeno causado por seres naturales tremendamente más avanzados tecnológicamente que nosotros, seres capaces de recomponer miembros, resucitar difuntos, o, a las malas, generar alucinaciones colectivas con gran espectáculo...Más:El argumento de la plenitud ontológicaEl condón no protege contra el sidaEl argumento FarylógicoEl problema de NewcombEcos de la Edad Media
Enrólate en el Otto Neurath

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revista