Revista Cultura y Ocio

Qué leo y qué leeré próximamente

Publicado el 22 septiembre 2014 por Sasy
Pensaba comenzar esta entrada con una especie de justificación, una excusa para traer esto en vez de la reseña de las puñetas de El temor de un hombre sabio, o algo que sea, no sé, material decente. Pero lo cierto es que no necesito una excusa: me apetecía hablaros un poco de mis actuales lecturas, y también dejar caer los libros que leeré en cuanto acabe alguna de ellas. Veamos.
    Qué leo y qué leeré próximamente
  • La subasta del lote 49 (Thomas Pynchon): con motivo de la -teórica aún- futura lectura de El arcoíris de la gravedad que va a organizar Pablo, decidí comenzar a hacerme a la prosa, trama e ideas que presenta Pynchon en sus libros, habiendo escuchado que no es moco de pavo. De momento -acabo de sobrepasar el ecuador del libro- me he reído, he alzado las cejas en más de una ocasión y solo en los dos últimos capítulos he llegado a atar un par de cabos de esas locuras que me estaba diciendo el amigo. Estoy sumida en un pozo de incomprensión casi absoluta, pero ah, queridos, es tan delicioso y tan peculiar que no puedo menos que disfrutar como una enana.
  • Declara (Tim Powers): dije, cuando terminé El pozo de la ascensión y El temor de un hombre sabio, que tocaban un Powers y un Abercrombie, para leer algo de todos los autores "grandes" del Celsius. Y estoy todavía enfrascada entre las páginas de esta novela de espionaje que, por muy bien que esté escrita (que lo está), no tiene ni unos personajes que me atraigan demasiado ni una historia que me llame la atención. Es el primer libro de espías que leo y posiblemente sea el último. Me pierdo entre organismos, países, operaciones y más países.
  • Los miserables (Victor Hugo): lectura paralela. Llevo casi 200 páginas y es curioso el hecho de que la acción de película y musical solo se ha vislumbrado en un momento; ¿el resto? Puesta a punto de personajes, manual del buen cristiano, la terrible historia de Fantine. Magnificado todo ello por obra y gracia de un autor que prefiere que estés leyendo cinco años a que dejes una nimiedad sin conocer. Y yo encantada, claro. 
  • La carretera (Cormac McCarthy): cuarto, quinto, sexto, no sé, intento de leer este libro, que las primeras veces dejé por recomendación materna ("ya si tal cuando seas más mayor") y la última perdí cuando fui a Polonia (¿os he hablado alguna vez de mi manera de perder libros?). Llevo apenas unas treinta páginas y no puedo decir mucho, pero quería acabarlo antes de irme a Madrid así que espero y deseo que no pase de esta semana. McCarthy escribe como si estuviera corriendo y tuviese que dejar las frases a cuentagotas para que no se pierda nada. Es toda una experiencia. 
  • Además. Empecé en verano las obras completas de H. P. Lovecraft y aunque el terror (más concretamente el relato corto de terror) es uno de mis géneros favoritos y suelo disfrutarlo muchísimo, es arduo leer a un autor tan prolífico en relatos en su totalidad. Así que voy a dejar la lectura así aparte y me limitaré a leer algún cuento de vez en cuando y a centrarme en obras concretas. Cuando Lovecraft intenta emular a Lord Dunsany de una manera tan obvia me resulta bastante soporífero: le prefiero creando dioses y entes, hablando de ciénagas, de voces trémulas, de masas palpitanes y de hondas impresiones que tornan en blanco el cabello.
Comenzamos el curso escolar con una clara orientación hacia, por un lado, la literatura de género (fantasía, ciencia ficción y mi adorado terror, con el que me estoy reencontrando) y por el otro hacia los básicos de la literatura, tanto clásicos como literatura más contemporánea. Así, entre mis próximas lecturas se encuentran Sanderson (quiero acabar Nacidos de la bruma), Virginia Woolf (¡no puede ser que no haya leído nada suyo todavía), Yukio Mishima (El color prohibido) y por supuesto To kill a mockingbird (Matar a un ruiseñor) que vamos a leer una serie de personas en la lectura organizada por Pablo. Como nota aparte, rara, discordante en mis lecturas, pretendo continuar y terminar con la saga de Percy Jackson más pronto que tarde. Y por otro lado, toca sacarle todo el juego del mundo a mi Kindle; como algunos sabéis, me voy a Madrid a estudiar y pocos libros en papel podré llevar conmigo. A lo mejor así consigo no comenzar nueve libros a la vez, quién sabe.

Volver a la Portada de Logo Paperblog