Revista Cultura y Ocio

¿Qué necesitas?

Publicado el 29 septiembre 2016 por Águeda Lorena García González @aguedlgg

¿Qué necesitas?

Si en lugar de pensar en lo que a uno le falta, pensase quizás en lo que el otro necesita, el cuento cambiaría.

Estamos tan acostumbrados a deshacernos de las personas como si de cualquier objeto se tratase, que cuando algo nos molesta o no nos satisface en la medida que esperamos, optamos por "mandar todo al carajo".

Hace unos días leí un artículo en el que se explicaba precisamente esto y las preguntas: ¿Qué necesitas? O ¿Qué puedo hacer para mejorar tu día?, me han hecho comprobar lo egoístas que podemos ser cuando ya se nos olvida que además de nuestras necesidades, el otro/a tiene también las suyas.

No me puedo creer que en los últimos 10 años el 50% de las parejas se hayan equivocado y sean tan infelices en sus matrimonios... ¿Estaban drogados cuando se casaron? ¿Se han casado con una princesa que con el tiempo se convirtió en un orco?

Quizás ya se les olvidó porqué eligieron a esa persona para formar parte de su vida, o ya no se acuerdan de todas las virtudes que un día le vieron, tal vez ella engordó o él se quedó calvo... yo que sé.

El caso es que yo también entono el "mea culpa" y creo que en alguna ocasión se me olvidó preguntarle al otro: ¿Cómo puedo mejorar tu día?

¿Qué necesitas?

Él, podría responder cualquier cosa... (pues para mejorar mí día podrías dejar de tocarme las narices....) o podría haberme dicho: "uno rapidito no estaría mal"...

Podría decir cualquier chorrada, pero al menos si necesitaba algo para estar más contento o más feliz, yo podría intentar dárselo.

Recuerdo perfectamente que en mi caso, el desastre llegó sin previo aviso y ya no me dio tiempo a preguntarle:

¿Qué necesitas?...

Y para cuando se lo pregunté, ya era tarde.

Fue tan tarde que ni me respondió a los mensajes, que ni me devolvía las llamadas, ni encontró en lo más profundo de su corazón un solo motivo para quedarse.

¿Tanto rencor llevamos dentro? ¿Tanto nos desespera la situación? ¿Tan incapaces somos de encontrar un modo de reparar los daños de nuestro corazón?

Pero a raíz de un artículo leído en la revista GQ (sí, leo mucho) sobre el divorcio de Angelina y Brad Pitt (que ya se me ha caído el mito sobre la familia feliz), dos mortales más que pese a sus cuentas bancarias llenas de ceros... Han sucumbido a la moda de olvidarse de las necesidades del otro.

Si cuando estoy a punto de desesperar, en lugar de gritarme; me preguntasen: ¿Cómo puedo hacer que te sientas mejor? Estoy segura de que alguna respuesta le daría...

Y aunque no puedas hacer nada por el otro, saber que le interesa cómo te sientes o que quiere hacer algo por ti, es una prueba de que está dispuesto a luchar por lo vuestro.

Aceptemos que todos evolucionamos y que las relaciones suelen evolucionar con nosotros... y aceptemos de una vez lo siguiente: LA GENTE NO CAMBIA.

¿Qué necesitas?

Por lo tanto, si algo en la relación no nos gusta, debemos cambiar antes nosotros.

Sólo el cambio de nuestras actitudes, de nuestras formas, de nuestras costumbres... Sólo el cambio permite que la relación avance.

Tu pareja puede que se haya cansado de tu sucia costumbre de no levantar la tapa del váter, de tu manía de avisar que no llegarás a cenar cuando ya te ha preparado el solomillo... o puede que se haya cansado también de que a ti SIEMPRE "te duela la cabeza", que al final la culpa no es de uno solo ¿verdad?

Y me reí leyendo aquel artículo sobre la mediocridad del amor en estos tiempos... Sobre la falta de responsabilidad y de escrúpulos cuando formamos una familia para después pelearnos por quién se queda con esto o con aquello...

De levantar sueños junto alguien para después levantar muros que nos impiden decir lo que sentimos, lo que queremos, lo que necesitamos...

Muros que ya no nos permiten pedir perdón o decir "lo siento".

¿Qué puedo hacer para mejorar tu día de hoy? ¿Te preparo un café? ¿Quieres que saque yo al perro a pasear, que sé que te fastidia hacerlo? ¿Quieres que te prepare hoy tu cena favorita? ¿Crees que un abrazo mío mejoraría tu día?

Nos hemos olvidado de las grandes lecciones de esta vida: que la alegría está en el dar, no en el recibir, que sin esfuerzo hay pocas cosas que se mantenga vivas...

Y pensamos que con nuevas ilusiones (erróneos y fugaces sentimientos) que con una nueva vida, que con cambiar de casa o de pareja... Que todo va a volver a ser como era cuando la conociste, que recuperarás los 20 años que invertiste en ese matrimonio... Mentira.

Tan sólo puedo dar un consejo a los que están pensando seriamente en dejarlo todo porque no están satisfechos con su pareja:

Acuérdate de preguntarle ¿Qué necesita? Porque quizás te dé respuestas que lo mejoren todo, y le ayudes a recordar también que esa pregunta debe hacerla también para ayudarte a mejorar tu día.

Pregunta qué es lo que necesita el otro, porque sinceramente, cuando todo se vaya a la mierda y ya no quiera responderte o te abandone, o te cambie por otro/a...

Tendrás para pensar en ti y en lo que necesitas (tú y solamente tú) el resto de tu vida.

Volver a la Portada de Logo Paperblog