¿Qué pruebas médicas se realizan para obtener o renovar el carnet de conducir?

Todos los conductores o aspirantes a serlo deben pasar por una revisión médica para así poder obtener o renovar su carnet de conducir. Estas pruebas son esenciales para certificar que la persona sentada al volante no padece de ninguna limitación física que atente contra la seguridad vial.

A continuación compartimos las pruebas que se realizan de forma obligatoria a la hora de obtener o renovar el carnet de conducir:

1- Análisis del historial clínico para así realizar un reconocimiento de posibles enfermedades y/o pasadas intervenciones quirúrgicas. El doctor realizará preguntas para completar la ficha clínica.

2- También se realizará un estudio psicotécnico para así conocer:

- la coordinación visomotora: capacidad de generar una respuesta/acción tras percibir un estímulo visual

- el tiempo de reacción múltiple: prueba en la se expone al individuo a múltiples estímulos visuales y auditivos y se analiza el tiempo que tarda en dar respuesta.

- la anticipación de la velocidad: la capacidad de espera y el autocontrol

- la inteligencia práctica: se analiza el procesamiento de la información y la toma de decisiones. Algunas pruebas que se realizan son: test B101 de EOS, test del dominó TIG-1 de TEA, etc.

3- Además de estas pruebas se realizan pruebas del nivel auditivo y capacidad visual, para determinar que estas facultades sensoriales son aptas. A nivel visual se certifica que el sujeto pueda identificar correctamente los colores, agudeza visual (nitidez y lejanía de visión), sensibilidad al contraste (deslumbramientos), deterioro progresivo de la capacidad visual, etc.

Según informa la Dirección General de Tráfico (DGT), entre el 1 y 5% de los accidentes de tráfico se deben a problemas de la visión.

4- Los estudios de capacidad auditiva se basan en una exploración del oído, pruebas de equilibrio, y en caso de que sea preciso, una audiometría.

5- Otros estudios que completan esta revisión médica para conducir son: inspección de la movilidad, fuerza y coordinación del conductor a la hora de estar al volante. El sistema respiratorio y cardiovascular también entran en esta revisión: tensión arterial, auscultación cardio-pulmonar, pulsaciones, etc.