Revista Coaching

¿Qué tipo de hombre estas buscando?

Por Adrylin
En una breve conversación un hombre le pregunta a una mujer: “¿Qué tipo de hombre estás buscando?” Ella se quedó un momento callada antes de verlo a los ojos y le preguntó: “¿En verdad quieres saber?” Él respondió: “Sí” Ella empezó a decir… “Siendo mujer en esta época, estoy en una posición de pedirle a un hombre lo que yo sola no puedo hacer por mi. Yo pago todas mis facturas. Yo me encargo de mi casa si¿Qué tipo de hombre estas buscando?n la ayuda de un hombre. Yo estoy en la posición de preguntar, “¿Qué es lo que tú puedes aportar a mi vida?” El hombre se le quedó viendo. El claramente pensó que ella se estaba refiriendo al dinero. Ella rápido sabiendo lo que él estaba pensando dijo: “No me estoy refiriendo al dinero. Yo necesito algo más. Yo necesito un hombre que luche por la excelencia en todos los aspectos de la vida”. Él cruzó los brazos se recargó en la silla y mirándola le pidió que le explicara. Ella dijo: “Yo quiero a alguien que luche por la excelencia espiritual, porque yo necesito a alguien con quien compartir mi fe en Dios. Yo quiero a alguien que luche por la excelencia mental, porque yo necesito a alguien con quien conversar y que me estimule mentalmente. Yo no necesito a alguien mentalmente simple. Yo quiero a un hombre que luche por la excelencia financiera, porque yo no necesito una carga financiera, pero que podamos administrar con inteligencia el dinero que llegue a nuestras manos. Yo quiero a alguien suficientemente sensible para que me comprenda por lo que yo paso en la vida como mujer, pero suficientemente fuerte para darme ánimos y no dejarme decaer. Yo quiero a alguien a quien yo pueda respetar. Para poder ser sumisa, yo debo respetarlo. Yo no puedo ser sumisa con un hombre que no pueda arreglar él mismo sus problemas. Yo no tengo ningún problema con el ser sumisa (simplemente él tiene que merecérselo)… ¡Dios hizo a la mujer para ayudar al hombre! Yo no puedo ayudar a un hombre que no se puede ayudar a sí mismo”. Cuando ella terminó, lo vio a los ojos y él se veía muy confundido y con interrogantes. Él le dijo: Estás pidiendo mucho. Ella le contestó: Yo valgo mucho.




Volver a la Portada de Logo Paperblog