Quien siembra vientos…ii

Ayer Rajoy volvió a montar su numerito catalanofobo esta vez en el Senado pegándole gritos a Mireia Cortes, senadora de ERC.

Solo me referiré a una de las estupideces que soltó porque una vez más el PP acusa a los demás por hacer lo mismo que ellos. Refiriéndose a la ya famosa Ley de desconexión publicada en el País, que por cierto tan bien les ha ido para que no se hable de otras cosas más corruptas y ciertas, se puso a gritar diciendo que se pretendía aprobar en una sola sesión del Parlament y aparte calificarlo como dictatorial afirmó que no existe país en todo el mundo que haya cometido tal barbaridad, pero se equivoca, si hay uno, se llama España y su presidente llamado Mariano Rajoy, cuando tenía mayoría absoluta en el Parlamento, modificó ni siquiera en una sola sesión sino de manera instantánea nada menos que su Constitución para introducir los límites al déficit presupuestario porque una tal Führer Merkel se lo exigía.
Curiosamente, los que se niegan a saber la verdad sobre el independentismo con un referéndum, pedido por una larga mayoría de catalanes, son los que apelan a la democracia y acusan de dictadores a los que lo quieren celebrar, pero claro, esto es España y el PP.
La ministra Cospedal para no ser menos que Rajoy también soltó su burrada “si estuviéramos en otro país hablaríamos de golpe de Estado”. Se equivoca, en un país serio y sin ministras duras de mollera haría años que tendrían el problema solucionado mediante un referéndum. El comentario es preocupante porque en su partido tienen mucha experiencia en golpes. Hicieron y hacen algo muy similar con la Operación Catalunya, que no es un golpe de Estado pero si un golpe DEL Estado a la democracia, con la única diferencia que, al contrario que en otros países que han sufrido golpes DEL Estado y han condenado duramente a los responsables, en España no ha pasado ni pasará nada.
Por cierto, la estupidez y el franquismo hispanos empiezan a ser conocidos en todo el mundo. La prensa británica se ha hecho eco, furiosos y cabreados, del numerito de risotadas del Canal 13, el falsario, cuando recibieron la noticia del ataque terrorista de Manchester, y un periodista del New York Times, refiriéndose a la manifestación falangista delante del Ayuntamiento de Madrid, se extrañaba de que tal demostración de signos nazis se diese en Europa y se preguntaba si eso era normal. Seguramente a estas horas ya sabe que eso no ocurre en otras partes de Europa, pero que España es cualquier cosa menos normal y seria, en especial su gobierno y los que lo votan.
El problema catalán lo inició el PP probablemente a propósito y con plan previo como la propia cronología lo demuestra, antes de que en el 2000 Aznar ganase las elecciones por mayoría absoluta todos los independentistas cabían en un autobús como el de Podemos y sobraban asientos, y a medida que el independentismo ha ido aumentado hasta el recurso contra el Estatut y después del fallo del TC que supuso el gran estallido independentista, el PP se ha limitado a hacer lo posible para no solo no solucionar el problema sino empeorarlo cada día más, y a través de las falsedades e insultos de la caverna mediática han separado a propósito a Catalunya de España, aunque tengan la desfachatez de acusar de ello al independentismo.
Si en vez de esta desastrosa actuación, después de su reunión con Mas en septiembre 2012, Rajoy hubiese hecho como Cameron, convocando un referéndum a un año o dos, y actuando con un mínimo de inteligencia, el resultado sin duda hubiese sido un claro no a la independencia y el fin del problema al menos por bastantes años. Es Rajoy y el PP quienes nos han traído hasta esta desastrosa situación, no Puigdemont.