REDES SOCIALES: El escudo perfecto de los COBARDES

Por Ailen Rodríguez desde Uruguay

Yo, realmente no salía de mi asombro. Sí, en la era de las telecomunicaciones, uno puede pensar que esto es común. Pero cuando me llamó mi amiga para contarme que su novio de casi un año la habia dejado por el chat de Facebook, verdaderamente no podía creerlo.

¿Qué lleva a la gente a escudarse en la red para no tomar decisiones importantes en su vida? ¿Qué los hace creer que es mas simple o que las consecuencias son menores? 

Adentrémonos más en la realidad de los cobardes cibernéticos.

Después de un vínculo cercano al año, Paola me llama en un ataque de llanto. Después de descifrar que Mathias la había dejado y que ella lograra calmarse un poco, me doy cuenta que el problema, más allá de ser la ruptura, era la forma que él eligió para comunicar su decisión de terminar.

En el momento que uno define cualquier cosa importante en su vida, lo cuenta o se lo comunica a la persona indicada. De acuerdo a la relevancia del hecho, uno tiende a elegir la mejor forma de hacerlo. ¿Cómo romper con alguien por chat, puede ser una buena opción? Mi amiga lo adujo a su cobardía y, en parte, se torna un poco indefendible la actitud de Mathias.Me puse a pensar si alguna vez me había pasado. La respuesta fue no. Sí recordé cuando era muy pequeña, allá por los 14 o 15 años, una llamada telefónica que terminó en un "te corto" (frase usada en Uruguay para terminar con alguien, generalmente usada por las personas menores de 15). Pero pasados más de diez años, sin duda adjudique a la edad esta actitud infantil. ¿Pero entre adultos? No, verdaderamente no puede ser válido.

Las redes han tendido, además de lazos, una serie de escudos que nos ponen al cubierto de un sin fin de factores en la interacción humana, como por ejemplo la entonación verbal (que da sentido a lo que uno dice), los tiempos de intercambio (mientras que no aparezca el "visto" del chat de Facebook uno sabe que el otro aún no ha recibido nuestro mensaje), los tiempos para pensar qué responder e incluso si responder, hasta el extremo de eliminar a alguien de nuestros contactos si verdaderamente no queremos más "vínculo" con esta persona. Todos estos factores (y muchos más), han hecho de la red un escudo protector de responsabilidades, en donde uno puede hacer y decir lo que quiera, nada nos pasará, dado que el interlocutor está como mínimo a muchos metros de nosotros. Como diría un amigo mío, "del otro lado del teclado son todos vivos y malos".

La parte que Mathias perdió es los espacios en común que comparte con Paola, así como con varias de sus amigas. Por lo que su actitud, lejos de escudarlo (más allá del momento), lo puso en evidencia como una persona incapaz de asumir sus decisiones frente a los demás. Solamente puedes bloquear a alguien en Facebook, pero no en la vida real...

La inmediatez y la lejanía que nos da la red -porque además de acercar, también establece barreras propias del medio- nos hace perder de vista el que pasará mas allá de la pantalla, en donde el mundo real no tiene barreras.
Hagamos un uso responsable de los medios, que de esa forma, seguro, no habrá llantos producto de una PC, ni tampoco cobardes ciberneticos.