Relato gay. un gay diferente. capítulo 7: malas noticias

Abrí los ojos desorientado. Estaba tumbado en una cama de hospital y me dolía muchísimo la cabeza. Miré a mi alrededor pero no había nadie en la habitación. Intenté incorporarme, pero me resultó imposible, el dolor era insoportable. Pulsé el botón para llamar a la enfermera que se encontraba al lado del cabecero de la cama. Pasaron unos segundos y una joven enfermera entro corriendo en la habitación.
-¡Estas despierto!- exclamó- Voy a avisar al doctor.
Volvió a a salir a toda prisa de la habitación y a los pocos segundos regresó con un médico. Este tenía el pelo blanco pero no debía ser demasiado mayor. Tendría unos cincuenta años, pero las canas le hacían parecer algo mayor de lo que era.
-¿Cómo te encuentras?- me preguntó.
-Me duele mucho la cabeza- respondí- ¿qué hago aquí?
-Voy a administrarte un analgésico- dijo la enfermera mientras inyectaba el contenido de un pequeño vial en la vía que tenia puesta en mi brazo derecho.
-¿No recuerdas nada lo que pasó?- preguntó el doctor mientras dirigía la luz de una pequeña linterna hacia mis ojos para inspeccionar el interior de mis pupilas.
-No, ¿como he llegado aquí?- pregunté confuso.
- Te caíste por una escalera y te golpeaste la cabeza- explicó el doctor.
A mi mente vinieron las imágenes de Valentín y Roberto peleando. Recordé cuando tropecé con el escalón y caí escalera abajo.
-Si, ahora lo recuerdo- respondí- ¿donde están Valentín y Roberto?¿Están esperando fuera?
-No están aquí- respondió el doctor- han pasado quince días desde que tuviste el accidente, has estado en coma todo este tiempo.
Miré al médico sin poder creer lo que estaba oyendo. ¡¿Había estado en coma quince días?!
-Has tenido mucha suerte- continuó diciendo el doctor- tus amigos llamaron enseguida a una ambulancia y los sanitarios te trajeron al hospital enseguida. Ahora las enfermeras llamaran a tus familiares y a tus amigos para darles la noticia y que puedan venir a visitarte.
-Gracias- respondí.
-Ahora te dejamos descansar un rato y luego volveremos para realizarte algunas pruebas. Después el doctor y la enfermera salieron de la habitación cerrando la puerta tras de si. Yo me quede allí tumbado mirando al techo. Poco a poco mis ojos se fueron cerrando hasta quedarme completamente dormido.
*                            *                           *
Desperté y me asusté al ver una cara cerca de mi.
-¡Ya le has despertado!- dijo una voz que me resultaba conocida.
La voz era de Roberto y la cara que tenía cerca de mi era la de Valentín. 
-Lo siento no quería despertarte- se disculpó Valentín.
-¿Que hacéis aquí?- pregunté- ¿Y mi madre?
-Ha salido fuera un momento- respondió Roberto.
-¿Que tal estas?- preguntó Valentín mirándome preocupado.
-Dolorido, pero ya estoy mejor- dije.
-Nos alegra que estés mejor- señaló Roberto- nos llevamos un susto de muerte cuando te caíste.
Agarré el mando de la cama y subí el cabecero para poder hablar con ellos mas cómodamente y al hacerlo noté un movimiento extraño en Roberto y Valentín. Se separaron rápidamente y me pareció que estaban agarrados de la mano y que se habían soltado fugazmente para que yo no les viera.
-¿Que esta pasando aquí?- pregunté-¿Estabais agarrados de la mano? ¿Es que ahora estáis juntos?
Valentín y Roberto se miraron el uno al otro sin saber que decir al verse descubiertos.
CONTINUARA...


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