Renovarse o morir: Editorial Agrícola estrena nueva Web

Sara Pérez Jerónimo

Periodista

Bajo este lema, día a día vemos como los medios de comunicación se adaptan a los nuevos tiempos, que a día de hoy conviven en un contexto de crisis. Abandonando la idea de un formato único, son muchas las publicaciones que salen cada día adelante gracias a la diversificación de contenidos. Las más afectadas, las publicaciones especializadas. Muchas de ellas, han visto cerrar sus instalaciones. Otras muchas son un ejemplo de supervivencia.

Agricultura, hija predilecta de Editorial Agrícola y decana de las revistas del sector ,es una de las que ha optado por la renovación total de sus contenidos, pero manteniéndose fiel al estilo que la caracteriza. La revista cuenta con una nueva página web que va más allá de la información y de la actualidad. Estructurada en cinco bloques, pretende convertirse en una guía de referencia al lector, aportándole nuevas posibilidades, como la organización de eventos o actividades formativas. Además, ofrece la posibilidad al usuario de poder comprar un ejemplar de cualquier publicación incluida en el extenso catálogo de libros de la editorial.

De este modo Editorial Agrícola se presenta como un ejemplo de modernización y adaptación a los cambios de una sociedad que evoluciona a pasos tan agigantados que a veces es difícil seguir su ritmo. Y es que tras 81 años en el panorama agrícola, Agricultura se mantiene viva como el primer día.

“El sector atraviesa una profunda época de cambio, que implica retos y oportunidades, entre ellas la de aprovechar las nuevas vías de comunicación que ofrece Internet. Sin embargo, deberíamos contribuir a que el público valore que no todo puede ser gratis y es necesario pagar por una información especializada y de calidad” aseguró hace unos meses en unas jornadas celebradas por la Asociación de Periodistas Agroalimentarios (APAE) Jesús López Colmenarejo, coordinador de la revista.

81 años de aventuras en periodismo especializado

No todas las publicaciones como Agricultura pueden presumir de llevar tantos años en la palestra informativa. La clave de su éxito: un amplio repaso de actualidad y sus reportajes de investigación realizados por una redacción de periodistas expertos en el sector y que intentan plasmar en cada número el panorama agrario a nivel nacional e internacional.

Agricultura comenzó su andadura el frío mes de enero de 1929, rodeada de un contexto político y económico distinto al que hoy en día conocemos: la dictadura de Primo de Rivera. Sin embargo, pese a todo y gracias a la eficaz campaña de propaganda realizada por los propios accionistas de la publicación, la revista tuvo un gran éxito de acogida y pronto se afianzó dentro del medio rural.

Unos años marcados por el proceso de cambio y las dificultades que no afectaron a la “recién nacida”, que siguió su camino y vio como sus suscriptores crecían a marchas agigantadas, llegando incluso a sobrepasar una difusión de 4.000 ejemplares, cifra considerable para los tiempos que corrían. Y es que uno de sus grandes pilares fue mantener en todo momento una independencia política absoluta, desligándose así de los principales problemas de una España que pronto caería en las garras de la Guerra Civil y que obligó a suspender la revista a partir de agosto de 1936.

Tras cuatro años de ausencia, en enero de 1940, Agricultura retomaría su camino, recuperando y aumentando su número de suscriptores y la publicidad de la revista, que rápidamente llegó a alcanzar una tirada de 5.000 ejemplares.

Apenas dos décadas más tarde y gracias a una serie de pilares a los que la redacción mantuvo férreamente y un proceso de modernización, la revista aumentó su prestigio, en un panorama aún complicado por la reducción y carencia de libertades y por la creciente aparición de nuevas publicaciones similares.

Una labor que se ha ido perfeccionando a lo largo de una larga andadura y que han hecho a la esta publicación madurar y llegar a lo que e hoy: una revista de gran prestigio y al mismo tiempo muy arraigada al mundo agrario que la vio nacer.  

Una historia intensa de altos y de bajos, pero que mantiene su frescura a pesar del paso del tiempo.