Reseña "Los Abisales"

Una cadena de terremotos ha sacudido la Tierra y regiones enteras han quedado sumergidas bajo el agua. Los humanos viven ahora hacinados en ciudades. Los únicos que poseen un espacio propio son los habitantes del lecho marino, los Abisales. Ty ha vivido toda su vida en el fondo del mar, ayudando en la granja familiar. Pero cuando unos forajidos atacan su casa, tendrá que luchar por salvar el único hogar que ha conocido. Junto a Gemma, una chica de Arriba que ha llegado hasta allí para buscar a su hermano, Ty se adentrará en las profundidades de la frontera submarina, donde no rige ninguna ley, y descubrirá oscuros secretos que amenazan con destruirlo todo.

Gracias a Pàmies por el envío del ejemplar

Cuando supe que este libro iba a llegar a nuestras librerías, estaba convencida de que al final uno de los ejemplares acabaría en mi estantería. Con esa preciosa portada que te atrapa en cuanto la ves, esa historia tan rara y a la vez original sobre una civilización que vive bajo el mar, tenía todos los ingredientes para que fuera una buenísima lectura. Y así ha sido.

En este libro conocemos a Ty, un chico que ha vivido durante sus dieciséis años de vida en el fondo del mar, explorando el profundo océano y ayudando a sus padres a cuidar la granja de peces familiar. Vive tranquilo y sin complicaciones, planeando cómo será su casa cuando cumpla la mayoría de edad y pueda reclamar tierra para sí mismo, y es que los Abisales no tienen el problema de falta de espacio como lo tienen los de Arriba, afinados en minúsculos apartamentos y peleándose por la escasa tierra que ha quedado. Pero la tranquilidad de Ty se tambalea cuando conoce a Gemma, una chica de Arriba que ha bajado al océano para encontrar a su hermano perdido, mientras tienen que hacer frente a los saqueadores, unos delincuentes marinos que hacen peligrar la pacífica vida bajo el mar. Y es que el océano esconde más secretos de los que Ty puede imaginar.

La historia central que se nos muestra en Los Abisales es la lucha de la comunidad contra un grupo de saqueadores que está dañando las importaciones de productos a la gente de Arriba, donde están todos los que gobiernan. Por eso mismo, es el gobierno de Arriba quienes les ordenan a los habitantes del mar a combatir esa situación si quieren seguir cobrando las ayudas para sus granjas. Ty es un chico joven y aventurero que no ha conocido otra vida y que teme por su futuro, pero aún así, se pone en riesgo más de lo que debería. El libro va enlazando sucesos a medida que avanza, explorando los fondos marinos. Al principio reconozco que me lié un poco, ya que la autora comienza el libro por una de las tantas excursiones de Ty por el océano y utiliza términos de los que no se sabrá su significado hasta más adelante. Tampoco sabemos mucho de los famosos terremotos que asolaron la tierra y que la dejaron casi sin espacio para vivir, nos cuenta que sucedió en el pasado, pero sin ahondar en el tema, cosa que me hubiera gustado saber, ya que me parece un dato curioso.

Uno de los puntos fuertes de este libro y que me encantó fue la habilidad de la autora de crear una sociedad bajo el mar. Todo está bien estructurado, tienen un sistema propio de gobierno, viven en pueblos y poseen un espacio común con los de Arriba, sitio donde se reúnen a debatir los problemas de las profundidades y donde llegan las provisiones. Pueden pasar largos períodos bajo el mar gracias a Liquigen, un líquido que se instala en sus pulmones y que les permite no ahogarse. Tal vez una de las cosas que más me extrañó es sus casas, a pesar de estar bajo el mar, no se inundan. Tienen contacto con el océano a través de unas piscinas que están conectadas a la casa (lo que para nosotros sería la cochera en un casa), pero aún así, ésta nunca se desborda ni nada por el estilo.

Gemma aparece en el primer capítulo del libro, y se nos presenta como una chica preocupada por su hermano perdido, pero a medida que la historia avance, dará más de una sorpresa. Ambos protagonistas encajan bien desde el comienzo y Ty se compromete a ayudarla, aunque no las tiene todas consigo. También está el tema de los saqueadores. Al principio despita un poco porque no se sabe nada de ellos. No nos cuentan el por qué de sus fechorías, ni por qué atacan las casas ni nada, es más o menos pasando un poco más de la mitad del libro, cuando más o menos podemos ir encajando las piezas, lo que da un halo de misterio que te mantiene pegado a sus páginas. Hay una bomba en torno a la identidad del líder y que reconozco que no vi venir, cosa que me gustó, ya que eso significa que la autora supo llevar ese dato adelante sin soltar nada revelador por el camino. También me sorprendieron las habilidades de Los Abisales (de los niños nacidos en el océano) y creo que la autora los explotará más en el segundo libro.

[...]Quizá cuando se hubiera adaptado más me enviaría una señal para decirme que le parecía bien, pero por ahora me conformaba con compartir el océano con ella.

Y aquí una pega: la falta de acción. Es cierto que en los últimos capítulos hay escenas donde estaremos pegados al libro sin poder soltarlo, pero el resto de capítulos es más bien introductorio, donde se nos cuenta la vida marina para situarnos y poco más. Quedan muchas cosas sueltas por el camino y espero que se resuelvan en el segundo. Hubo escenas que estaban más bien de relleno, que si prescindimos de ellas, no afectan a la trama, pero son las menos y no afectan a la lectura. También me percaté de cierto fallo en la narración (quisquillosa yo, pero es que fue un fallo muy visible) y que me hizo gracia en parte, aunque es algo más como anécdota que otra cosa.

Van apareciendo personajes nuevos a medida que la trama avanza, pero prácticamente a los que más conocemos es a Ty, el protagonista y quien nos cuenta la historia (ya que el libro está narrado en primera persona desde su punto de vista) y a Gemma, con la que Ty mantiene más contacto y con la que entabla una relación de amistad. Ty me gustó la mayor parte del libro, ya que es un protagonista carismático y que crea situaciones de acción en la trama, pero también me resultó un poco egoísta, ya que su mayor preocupación es poder reclamar su parte de tierra cuando cumpla la mayoría de edad, y todos los problemas que van surgiendo lo alejan de su objetivo (está todo el libro así, más preocupado por eso que por otra cosa). También me pareció un chico inocente, ya que al ser el único adolescente en el mar, no tiene con quien relacionarse mucho. Gemma fue algo raro. Me cayó bien, ya que la vi una chica con fuerza y decidida, sin dejarse amedrentar por nada ni por nadie, pero hubo partes en las que estaba más interesada en conocer el mar que en encontrar a su hermano y me resultó extraño. No sé, si te dicen que tu hermano a desaparecido y que nadie sabe de él, te vuelvas loca por intentar encontrarlo o hallar pistas que te lleven a su paradero, pero no te quedas obnubilada por todo lo que descubres y te olvidas de tu objetivo, o al menos yo lo he visto así. No crea situaciones buenas en la trama por sí sola, sino más bien por su presencia allí. Quien me encantó fue la hermana pequeña de Ty, Zoe, una chica vivaz, sociable y con una extraña fascinación por criaturas calificadas como peligrosas.

La pluma de la autora me sorprendió. A pesar de introducir términos desconocidos relacionados con la vida bajo el mar, tiene un estilo muy sencillo y una narración muy ágil ni fluida, con unas descripciones muy bein detalladas pero sin llegar a recargar e texto y agobiar. Es muy fácil imaginar las escenas que van sucediendo y te sumerges en la historia sin percatarte de ello. Su final más o menos era de esperar, aunque no por ello pienso que sea malo, ya que al quedar abierto, nos da un aliciente para leer el segundo, cosa que me ha gustado.

"Los Abisales" es el primer libro de una biología ambientado en el fondo marino con un protagonista carismática y una historia de superación y amor por el mar que te enganchará desde el principio.