Reseña, relato: el ojo de la cerradura

   Para aquellos que no la conozcáis, Anabel Samani tiene su pequeño rinconcito en la blogosfera y por daros de alta en su correo, recibiréis gratuitamente este relato de terror escrito por ella: “El ojo de la cerradura”. Animaros, tardaréis unos segundos y podréis disfrutar de un relato interesante. ENLACE AQUÍ.
   Con este relato daré el pistoletazo de salida al mes de los monstruos, vampiros, brujas… que terminará en Halloween, y en el día de Todos los Santos. Qué mejor modo, ¿no?
   Me ha llamado la atención que la idea de la trama de esta historia surgió a raíz de uno de los microrrelatos presentados en el Reto de 5  líneas en el que yo también participo. Nunca sabes donde estará agazapada la inspiración.
   Yo por fin he tenido el valor de mirar por el ojo de la cerradura y ver lo que había al otro lado. No os puedo contar demasiado porque sino, podría estropear la sorpresa para aquél que decida aventurarse.
   «La mayoría de las veces nuestros pecados no consisten más que en estar en el lugar inadecuado en el momento equivocado, y eso había sido lo que me había condenado».
   Anabel elige este extracto para presentar su relato y creo que define con exactitud la base sobre la que se asienta la historia.  Nada hubiera sucedido si la mala suerte no se hubiera presentado a la mesa de trabajo de nuestra protagonista en forma de nota. Y si ella no fuera tan cotilla, claro está. ¿Por qué vuelves? ¡No vuelvas!
En una situación de riesgo extremo:
Norma nº1:  Corre.  
Norma nº2: No vuelvas jamás.
No lo olvidéis.
   La protagonista nos relata lo que pueden ser las últimas horas de su vida. A través de sus palabras descubriremos una aventura terrorífica, angustiosa, pero con muchos toques de humor; o al menos para mi. O tal vez sea que yo soy demasiado macabra. Un final con segundas intenciones, que podría dar para una continuación, ¿por qué no?   Hay una parte con la que no terminé de sentirme cómoda pero que según la muchacha: no es cierto que haya dicho suficientes veces la palabra "mierda". Aunque ya os digo que sí.   Un relato de terror original, rápido, con toques de humor que se lee en un suspiro y te deja tal vez con ganas de más. Animaros los que seáis valientes y echar un vistacito a lo que se esconde al otro lado de la puerta.
   Yo ahora voy a ver una caja que dicen que está vacía pero…, no sé yo.