Reseña: tan solo un segundo

Hannah tenía un futuro prometedor en aquello que más amaba: la danza sobre hielo. Una meta por la que había luchado junto a Nicholas, su mejor amigo y compañero, durante los últimos diez años. Hasta que el error de otro le demostró lo efímeros que pueden ser los sueños. Mikhail hace mucho que olvidó lo que era disfrutar al salir a la pista. Es más, tras la lesión que lo obligó a retirarse del patinaje artístico, creyó que nunca tendría ocasión de recordarlo. Sin embargo, el destino parece dispuesto a darle la oportunidad de volver a competir y, sobre todo, de cumplir una promesa grabada con tinta en su cuerpo. Claro que para ello tendrá que convencer a Hannah de que juntos pueden lograr grandes cosas. Para ambos, luchar por un nuevo comienzo significará tener que hacer frente a sus heridas emocionales, porque solo si son capaces de curarlas encontrarán la manera de vivir y amar sin fronteras.

Bueno. bueno no sabéis las ganas que tenia de contaros lo que me ha gustado este libro, cuando supe que mi queridísima Virginia sacaba libro no me lo pude creer y cuando me dio la oportunidad de reseñarlo se lo agradecí un montón porque me tenía muy intrigada y no me equivoque con él porque es sumamente fascinante.
Este libro nos va contando las vidas de Hannah, Nick y Mikhail o Misha (ya que así le llama Hannah), es una historia que nos enseña el amor por el patinaje artístico en cualquiera de sus formas, el amor por el hielo y yo sé lo que es eso, puesto que soy una gran fan del patinaje y aunque nunca he patinado sobre el hielo si lo hice durante mucho tiempo sobre el asfalto y se lo que es ese amor. Por eso creo que este libro me ha gustado aún más, porque me sentí súper identificada con ese amor por este deporte precioso.
Es una historia de superación, de aprender a vivir con lo que la vida te da en cada momento, de aprender que los malos momentos, los accidentes y los cambios drásticos en la vida de uno, nunca nos hará ser un estorbo o no valer para nada, solo será un obstáculo que tenemos que aprender a esquivar, porque ya sea de la manera que se siempre se sale adelante y siempre puedes seguir haciendo lo que más te apasiona, haciendo cualquier cosa que se te antoje, ya que nosotros mismo somos los que aprendemos y decidimos si queremos vivir con esa piedra en el camino y odiar todo, o por el contrario, esquivar esa piedra, salir adelante y vivir la vida que tenemos.
Engancha muchísimo desde el principio, yo reconozco que a mí me ha durado casi una semana el libro, pero fue porque lo cogí justamente en un parón lector y aunque me costó un poco comenzar con el luego no pude parar hasta acabarlo, me he reído mucho con cada uno de los personajes, me he cabreado también en algunos instantes, pero sobretodo he disfrutado con todos y cada uno de los momentos que tiene. También me gusto muchísimo el hecho de que la autora implementara cosas de Disney, Harry Potter y así, en esos momentos se notan los gustos de ella y es magnífico porque te identificas aún más con los personajes y los consideras mas parte de tu vida.
En general yo a este libro no le he visto ningún fallo, me ha fascinado y creo que seré una fiel seguidora y lectora de Virginia, creo que si ella sigue permitiéndome reseñar sus libros futuros yo seré feliz leyéndolos y enseñando a la gente lo maravillosos libros que se escribirá.

Y bueno con esta reseñita ahora si que si os dejo hasta mañana, un besazo amores