Residente: René

A decir verdad, no tenía ni idea de quién era el tal Residente.

Sí que es verdad que conocía a Calle 13, aunque sólo de oídas, vamos, que tampoco es que tuviera mucha idea acerca de qué tocaba el grupo. A la cabeza me saltan (no sé porqué) ritmos tradicionales latinos, tipo salsa, cumbia, o sones Cubanos, adaptados a tiempos más modernos pero sin caer en aquel despropósito de genitales frotados que nos susurra el reggaeton. Me viene chan-chan, me viene Rubén Blades, y me viene también Silvio Rodríguez. Me viene el hecho de "bailar en la calle".

No doy una con la descripción, aunque sí que me acerco bastante a la corteza, ya que (leo) el grupo combinó durante los casi 10 años de su existencia (del 2005 al 2014) géneros tan variados como el ská, el hip-hop, o la música electrónica, con el amplio abanico musical que el folclore latino podía y puede ofrecer. Aún con todo, el grupo Portorriqueño quedó catalogado dentro del género del hip-hop, supongo que por puro descarte.

Pues bien, de Calle 13 salió René Pérez, conocido dentro del mundillo como Residente.

Un conocido periódico digital de amplia tirada me anunciaba en una de sus secciones lo emotiva, lo bonita, y todo lo que estaba dando que hablar la nueva canción del artista ganador de varios grammys... aunque no me interesó mucho.

Ese mismo día, y como si las cookies de mi portátil me estuvieran vigilando (¿lo hacen?), un reproductor de vídeos multimedia (también muy conocido) cuyo nombre no quiero decir, pero que sí diré que su nombre aglomera un pronombre personal y un medio de locomoción subterráneo (ambos términos, en lengua anglosajona), volvió a sugerirme el nuevo hit del artista mientras buscaba algo totalmente diferente, un directo de Slipknot, concretamente... ¡y seguí sin hacerle caso!.

Fue cuando de improviso me vino a la memoria una entrevista realizada al Portorriqueño en una televisión Española, y que, mira tú por dónde, sí había visto. Entonces en aquel momento me dije "cáspita, tres dardos certeros haciendo diana simultánea", bueno, la verdad es que no me dije eso, sino "coño, voy a escucharla pues".

"René" es básicamente una biografía reducida de la vida de Residente, dígase, desde sus primeros años de niño, hasta la actualidad. En ella se nos muestra un abanico abierto de sentimientos varios. René nos habla de felicidad, de emoción, de pérdida y congoja, de rabia, de frustración, de ira, de arrepentimiento, de vicios, de caer, de levantarse para caer de nuevo y entonces jurar. Nos habla de llorar. Y sobre todo de volver, de volver al principio.

"René" se llama así porque es la vida de René Pérez Joglar, pero podría ser la vida de José Luis López, y podría ser tu vida también, y la de él, y la de ella, así como de la de aquellos que fueron y vendrán.

Creo que la canción bien podría titularse "Olas en el mar", porque es así como debería ser la vida a grandes rasgos para todo el mundo. Uno nace, crece, y se desarrolla a lo largo de su existencia, experimentando sensaciones, desarrollando proyectos y construyendo una existencia provechosa hasta llegar a un límite o cúspide esbozado para unos por la propia vida, o para otros por el destino. Es en la cima cuando yo creo que todos nos damos cuenta de cuánto echamos de menos el origen, el pasado, lo bello de la simplicidad, y lo irónico que nos resultan ahora aquellas ilusiones que o bien nos empañaban la mirada, o bien nos hacían apretar los puños cuando decíamos "qué ganas tengo de ser mayor".

¿Cómo volver al pasado para no fallar?, o mejor, ¿cómo pedir perdón cuando bien se pudo?

Me pregunto cuántas veces me habré dicho lo mismo que Residente le dice a René:

"yo quiero volver a ser yo"