Revista Religión

Resucitó…aleluya! resucitó… aleluya!

Por Perfumedecristo R. Elisabet

resucito

Jesús nos hace la invitación : ¿Queremos ser testigos de su resurrección? … para ello nos interpela.

Sígueme y ama como yo he amado el mundo. Seremos testigos quienes estemos dispuestos, sin temores, ni dobleces…tenemos que ponernos los anteojos de Dios y ver con los ojos de la fe.  Aceptar la verdad de la muerte y resurrección de Jesucristo, tendremos que estar dispuestos además a penetrar en el misterio, a hacerlo nuestro, a transmitir esa noticia! hasta querer dar la vida por esa verdad, por esa aparición.

Dar la vida porque he visto a Jesús, Camino, Verdad y Vida… eso evidencia, y expresa ser testigos. El testigo vive lo que anuncia, lo manifiesta en obras, en su forma de vivir el Evangelio. Infunde “majestuoso huella”, da prueba esparciendo el perfume de Cristo con su propia vida. En griego, testigo se dice mártir, y eso es y debe ser el testigo. Por eso el testigo encarna en la propia vida; la muerte y la resurrección de Jesucristo por medio de la entrega, el servicio y el amor. Podemos “atestiguar” la resurrección de Jesucristo sumergidos en  el mandamiento principal. El mandamiento del amor… asegurando el compromiso como dice la canción:  devolver el bien por mal, perdonando de verdad, tratando de esforzarnos en poner paños fríos para apaciguar situaciones…

Verdaderamente quiero ser tu testigo Señor!… por eso:

Señor, hazme un instrumento de tu paz: donde haya odio, ponga yo amor, donde haya ofensas, ponga yo perdón, donde haya discordia, ponga yo unión, donde haya error, ponga yo verdad, donde haya duda, ponga yo fe, donde haya desesperación, ponga yo esperanza, donde haya tiniebla, ponga yo luz, donde haya tristeza, ponga yo alegría.

Oh, Señor, haz que yo no busque tanto el ser consolado como consolar, el ser comprendido, como comprender, el ser amado, como amar.

Porque dando es como se recibe, olvidándose de sí es como se encuentra, perdonando es como se es perdonado, muriendo es como se resucita para la vida eterna.   Así seremos verdaderos testigos de su Resurrección.

Aleluya ! Aleluya! El Señor Resucitó.

Lluvia de Bendiciones para Ti.


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revista