Review Fargo - Temporada 1

En 1996 los irreverentes hermanos Joel y Ethan Coen llevaron a la gran pantalla Fargo, película sobresaliente con la que tocaron techo. Protagonizada por William H. Macy (Shameless), narraba la historia que transcurre en el pueblo con nombre del propio título. Un hombre apocado y tímido, casado con la hija de un millonario que le impide disfrutar de su fortuna, decide contratar a dos delincuentes para que secuestren a su mujer con el fin de montar un negocio propio con el dinero del rescate. Pero, por una serie de azarosas circunstancias, al secuestro se suman tres brutales asesinatos, lo que obliga a la policía a intervenir.
En esta ocasión, el formato para televisión y en temporada de diez capítulos, nos lleva a la versión libre de la película. Creada y escrita por Noah Hawley, además de dirigir algunos capítulos.
La violenta y bizarra historia del pueblo cubierto por la nieve, y marcando el famoso contraste del rojo de la sangre que tan característico resulta desde la versión cinematográfica.
Protagonizada por Martin Freeman (Sherlock) y Billy Bob Thronton (El hombre que nunca estuvo allí). Un tímido y cobarde vendedor de seguros, encasillado en un vida gris e infeliz, conoce a un desconocido que cambia su vida por completo.
[SPOILER] 
La serie comineza desde su piloto con un ritmo frenético, con el que ya consigue atrapar al espectador en su atmósfera oscura y sanguinaria, marca de la casa de los hermanos Coen. En esta ocasión únicamente actúan como productores, pero se nota que hay mucha mano de su parte.
Lester Nygaard, el completo perdedor, amedrentado por casi todos, tiene un encuentro con un matón de su infancia, con el que comienza esta aventura. Él, impotente ante sus amenazas y agresiones, se resigna y traga con todo. Una vez en el hospital, va a curar sus heridas de la paliza sufrida. Allí conoce a Lorne Malvo, un asesino sin escrúpulos que le propone acabar con su enemigo. Lester termina aceptando de una forma indirecta, sin llegar a creerse demasiado las palabras de aquel loco.

Al llegar a casa, su mujer está allí, la misma que le infravalora y grita a todas horas. Al intentar reparar la lavadora del sótano fallidamente, ella comienza a gritarle. Él llevado por la ira absoluta y una comida de tarro de Malvo durante su conversación en el hospital, golpea brutalmente a su esposa con un martillo en la cabeza acabando con su vida.
Y aquí comienza todo. A su vez, Malvo ya ha acabado con su objetivo. Lester al salir de su enajenación le pide ayuda para limpiar la escena del crimen, pero todo se tuerce cuando la policía acude a su casa. Finalmente todo acaba en un trágico drama con el policía muerto también, a manos del asesino.
Posiblemente el comienzo es lo mejor de toda la serie. Una temporada que brilla en ocasiones, y que aburre en muchas otras. Con innumerables altibajos según la historia que se desarrolla. La pena de esto, es que en ocasiones echamos de menos a Freeman con su parte de historia y quizá se centra demasiado en otras cosas que carecen de importancia, como la trama de los policías: Molly Solverson (Allison Tolman) y Gus Grimly (Colin Hanks). 

Las referencias a la película original son evidentes, sobre todo el cierto parecido de algunos personajes con los clásicos, pese a ser una historia compeltamente diferente, (esta se desarrolla en 2006), todo contiene el mismo tono frío, de paisaje nevado y de aire rural.
Durante sus 10 episodios, tendréis buenas dosis de humor negro, violencia de la buena y situaciones o diálogos muy cómicos. Quizá yo pertenezca a esa clase de gente a la que en ocasiones, simpatiza tanto con "el malo", que llega a caerme mal la parte digamos "ética" como es en este caso la policía. Personaje al que no he tragado en ningún momento, queriendo a su vez ver salirse con la suya a Lester y su oscura evolución [muy similar a la que vimos en Walter White durante Breaking Bad], inlcuso más agresiva, ya que durante la temporada cambia mucho más rápido a convertirse en un autentico carbonazo.

Los secundarios bastante aceptables como es la aparición de Mr. Numbers (Adam Goldberg) y Mr. Wrench (Russell Harvard). Con unas interpretaciones muy destacables, aportando su curiosa y extravagante forma de actuar como sólo el cine de los Coen saben mostrar.
No voy a contar la historia completa, ya que si has llegado hasta aquí, lo más seguro es que ya lo has visto. Como opinión general, podría haber llegado a ser una obra maestra, pero debido a los grandes altibajos que predominan durante toda la serie, la calidad o la incertidumbre se desvanece de una forma gradual bastante significativa. Es una pena que empiece tan fuerte y se desinfle sin ir más lejos durante su segundo capítulo como ocurre. Brilla y deslumbra, tiene acción, drama, humor y sexo. Pero no supieron dar con la estabilidad necesaria. Echamos de menos a Freeman en muchas ocasiones, y al desenlace, su trágico final deja un sabor agridulce, de los que queríamos que, en el fondo de nuestros corazones, en un rápido ejercicio de empatía por el lado oscuro, se saliera con la suya Lester Nygaard.