Rito Alejo del Río se enfrenta a una condena de entre 25 Y 40 años de prisión por su responsabilidad en el asesinato por decapitamiento y posterior descuartizamiento del líder campesino Marino López Mena, en el municipio de Bijao, Chocó, perpetuado por los paramilitares.
Tanto la Fiscalia General de la Nacion, como la Procuraduria General de la Nacion, han sido enfaticos en pedir la condena conta el general (r) del Río
Por su parte el acusado del Rio a negado las imputaciones aduciendo que es un montje en su contra, negando los nexos que se le adjudican con los paramilitares y desconociendo amistad con el asesinado jefe de la Autodefensas Carlos Castaño
El otrora llamado “Héroe” y “pacificador de Urabá” ve sus miserias al descubierto en el proceso que se le sigue, cuando sus propios aliados los narcotraficantes y paramilitares Salvatore Mancuso; Ever Veloza, alias “HH” y alias “El Higuano”. Declararon las alianzas y contubernio con el ex militar procesado.
Los delincuentes extraditados Mancuso, Veloza y el “Higuano” relataron que el general (r) del Río les brindó protección, apoyo y respaldo del Ejército Nacional.
Enfatizando que Del Río era su protector y aliado estatal cuando estaba en servicio activo en la región. Acción realizada en contra de la población civil de la zona desatendiendo su obligación legal de protección a la población inerme. Conglomerado social que sufrió cientos de asesinatos selectivos y masacres y los que no murieron fueron desplazados a sangre, fuego y secuestro.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos, ha fallado contra Colombia varios de los casos por lo que se acusa al oficial en retiro, otros en los que el nombre del oficial en retiro esta vinculado siguen bajo esa jurisdicción en proceso.
A Rito Alejo del Río se le acusa de concierto para delinquir, peculado sobre bienes de dotación y prevaricato por omisión.
El Fiscal General de la época, Luis Camilo Osorio, al inicio de las investigaciones contra Del Río, consideró que, no había pruebas suficientes contra el oficial. En consecuencia, lo puso en libertad y archivó el caso.
La primera vinculación penal del general Del Río con crímenes de lesa humanidad cometidos por paramilitares la hizo la fiscal Lucía Luna, el Fiscal General Luis Camilo Osorio no aceptó lo actuado por sus subalternos y su respuesta fue pedir renuncias favoreciendo al hoy procesado y de esa forma quedó en el aire una denuncia sobre más de 150 asesinatos y más de 100 desapariciones forzadas en el Urabá en la que tenía jurisdicción el general , esos hechos no han sido investigados, quedando en la impunidad.
Ha raíz de esos despidos que ocurrieron al interior de la Fiscalía General de la Nación, en Junio de 2008 El Tribunal Administrativo de Cundinamarca ordenó el reintegro de Pedro Elías Díaz Romero (superior de la Fiscal Luna) fuera reintegrado a la Fiscalía General por considerar que su despido, en 2001, fue “arbitrario” y ocurrió “bajo presión laboral y sicológica”.
El tribunal también ordenó que la Fiscalía indemnizara a Díaz con una bonificación, más la totalidad de los sueldos y prestaciones e intereses de mora causados desde cuando dejó el cargo.
Ahora se esta a la espera del pronunciamiento del juez que lleva el caso y se da por descontado que se producirá en poco tiempo el fallo que resuelva la situación del ex General Del Río.
El ex Presidente Álvaro Uribe Vélez, quien defendió a ultranza la gestión del general y en el 2002, llego a tributarle en Bogotá un homenaje exaltando las supuestas “virtudes patrióticas” del militar hoy procesado.
Uno mas que resulto no se tan “buen muchacho” como lo pregono infortunadamente el Ex presidente, que ve el rosario de sus funcionarios enfrentar a la Fiscalía General de la Nación, por actividades desarrolladas en el ejercicio de sus cargos.
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