Revista Cocina
Las rosquillas en mi casa siempre son recibidas con alegría.
Es uno de los dulces que más éxito suele tener, por lo que tengo bastantes recetas diferentes, y siempre que veo alguna nueva, la apunto para ponerla en práctica. Es por ello, que cuando ví esta que hoy os dejo, en el blog de Hilda "Entre Alacenas y Fogones", y hablando con ella me comentó: "Nieves, no las hagas..." ¡¡Porque las comes!! jajaja.
El comentario ha sido para mí un reto. ¿¿Que no las haga, con la pinta que tienen?? No tardé en ponerme manos a la obra y... ahora os recomiendo lo mismo que ella me recomendó... No las hagáis, porque... ¡¡Se comen!!.
Quedan suaves, tiernas, esponjosas y con un sabor... ¿Cómo explicar un sabor? Esto de la informática, avanzó mucho, pero aún le queda un gran trecho... Transmitir olores, sabores, texturas... Todo llegará y entre tanto como para el fin de semana dan bajadas de temperaturas, ¿no es buen momento para meterse en la cocina y preparar estras deliciosas rosquillas?
Una vez más ¡¡Gracias Hilda!!
Ingredientes
- 3 huevos
- 9 cucharadas de azúcar
- 9 cucharadas de aceite
- 9 cucharadas de leche
- ralladura 1 limón
- ralladura 1 naranja (zumo opcional)
- 1 sobre royal
- pellizco de sal
- 1 vasito de ron, cointreau, anis...
- harina la que admita
Preparación
- Batir los huevos, azúcar y sal.
- Añadir la leche, aceite, zumo de naranja o licor elegido. Batir hasta integrar.
- Añadir ralladuras.
- Añadir harina y royal batiendo para que no se hagan grumos.
- Tiene que quedar una masa pegajosa, que se maneje con las manos bien aceitadas.
- Darles forma a las rosquillas, y freir en abundante aceite (de girasol, para que no les aporte sabor) a temperatura no muy fuerte para que se hagan por el centro, y no se quemen por fuera.
Es uno de los dulces que más éxito suele tener, por lo que tengo bastantes recetas diferentes, y siempre que veo alguna nueva, la apunto para ponerla en práctica. Es por ello, que cuando ví esta que hoy os dejo, en el blog de Hilda "Entre Alacenas y Fogones", y hablando con ella me comentó: "Nieves, no las hagas..." ¡¡Porque las comes!! jajaja.
El comentario ha sido para mí un reto. ¿¿Que no las haga, con la pinta que tienen?? No tardé en ponerme manos a la obra y... ahora os recomiendo lo mismo que ella me recomendó... No las hagáis, porque... ¡¡Se comen!!.
Quedan suaves, tiernas, esponjosas y con un sabor... ¿Cómo explicar un sabor? Esto de la informática, avanzó mucho, pero aún le queda un gran trecho... Transmitir olores, sabores, texturas... Todo llegará y entre tanto como para el fin de semana dan bajadas de temperaturas, ¿no es buen momento para meterse en la cocina y preparar estras deliciosas rosquillas?
Una vez más ¡¡Gracias Hilda!!
Ingredientes
- 3 huevos
- 9 cucharadas de azúcar
- 9 cucharadas de aceite
- 9 cucharadas de leche
- ralladura 1 limón
- ralladura 1 naranja (zumo opcional)
- 1 sobre royal
- pellizco de sal
- 1 vasito de ron, cointreau, anis...
- harina la que admita
Preparación
- Batir los huevos, azúcar y sal.
- Añadir la leche, aceite, zumo de naranja o licor elegido. Batir hasta integrar.
- Añadir ralladuras.
- Añadir harina y royal batiendo para que no se hagan grumos.
- Tiene que quedar una masa pegajosa, que se maneje con las manos bien aceitadas.
- Darles forma a las rosquillas, y freir en abundante aceite (de girasol, para que no les aporte sabor) a temperatura no muy fuerte para que se hagan por el centro, y no se quemen por fuera.