Revista Cocina

Salsa de tomate casera

Por Juanbellas

Andaba yo liado para la pizza de los viernes cuando me dí de cuenta de que no tenía salsa de tomate casera almacenada en el congelador, con lo que esta es una buena forma de hacerla.

Es una buena idea congelarla en porciones que veamos que solemos consumir, como partes de 200 ml en una receta de macarrones o en unas cubiteras como uso yo aquí, para cuando necesitemos apenas unas cucharadas para una pizza.

En este caso voy a emplear tomates enteros y pelados de los que vienen en lata. Este tipo de tomate lo tendremos a nuestra disposición todo el año, no solo cuando sea la temporada de esta hortaliza.

Además, si los tomates no son recién recolectados no tendrán un sabor realmente exquisito. Aquí, en Galicia, no tenemos el mejor de los climas para las plantaciones de tomates, pero recuerdo bien cuando los plantaba en mi huerto: recolectados en su momento más adecuado, para comerlos al momento eran un manjar de dioses: sólo con un chorrito de aceite de oliva y una pizca de sal ya se valían por sí solos.

En cambio, aquellos que venían de zonas más industrializadas, al ser recolectados en verde, por muy zona tomatera que fuese, no sabían ni la mitad de bien.

Por eso la idea de emplear botes de tomates en conserva: tienen un buen punto, son económicos y los tenemos todo el año disponibles.


Vamos con el paso a paso fotográfico:

Y bueno, pues esto era todo. Ya veis que tampoco tiene tanta historia el poder hacer salsa de tomate casera, la cual, incluso, podéis hacerla mientras os leva la masa de la pizza.

Lo único eso que, como tantas preparaciones caseras, sin conservantes, o bien la usáis en los días siguientes, o bien la congeláis para usarla más adelante.

¿Y tú?....¿cómo haces la salsa de tomate en tu casa?. Déjanos tus impresiones e ideas, que seguro que todos podemos aprender cosas nuevas.

Buen provecho internautas, nos vemos en la próxima entrada 😉


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