Sector aero en emergentes (II): Estado de aerolíneas e infraestructuras

En India la aviación comercial es relativamente nueva, las aerolíneas tienen mucho recorrido para crecer, y también mucho margen para equivocarse debido a su inexperiencia. De momento parecen ir por el buen camino ya que han ido adaptando su crecimiento a la crisis ralentizando su expansión, pero deberán ir creándose bases sólidas para su desarrollo. Los fabricantes deberían estar atentos a los movimientos corporativos y a los pedidos, ya que alguna aventura empresarial ambiciosa y mal construida podría hacer un roto a alguna tractora.

China, por otra parte, sí parte de un sector aeronáutico establecido, pero la liberalización económica está revolucionando la forma de hacer negocio. Las aerolíneas están tratando de hacerse un hueco en el nuevo escenario, y ahora son noticia los movimientos como fusiones, adquisiciones, inyecciones de capital, etc. Las principales aerolíneas (Air China, China Eastern Airlines y China Southern Airlines) están inmersas en un proceso de apertura de negociaciones con empresas del resto del mundo tras pasar a manos privadas que puede dar lugar a un importante número de pedidos.

Rusia es el país de los cercanos al entorno europeo (si no lo consideramos directamente como europeo) donde menos ha impactado el fenómeno de las aerolíneas de bajo coste, modelo que por otra parte puede adaptarse bien a las características geográficas y poblacionales del país. Además, las aerolíneas existentes están en pleno proceso de en transformación de su flota: en 1990 el 92% de los aviones que operaban eran de la industria nacional, y hoy hay una marcada tendencia a cambiar a aviones occidentales más modernos y eficientes.

En Latinoamérica se está desarrollando ya el fenómeno low cost, la siguiente transformación va a ser la de los vuelos intercontinentales. Hoy son las aerolíneas de fuera de la región las que llevan y traen pasajeros fuera de Sudamérica, en 20 años se invertirá la tendencia y serán las aerolíneas latinoamericanas quienes realizarán los vuelos intercontinentales en su mayoría.

En Brasil, el gobierno ha autorizado la entrada en el capital de las aerolíneas a inversores extranjeros hasta un 49%, con el objetivo de dinamizar el desarrollo de las aerolíneas más pequeñas, vía capital extranjero.