'Si el día de tu boda llueve no debes llorar', bajo la perspectiva de una fotógrafa

Acabamos la semana con una colaboración muy especial. Siempre me han alucinado los fotógrafos americanos, que hacen esas fotografías tan ideales en unas bodas tan espectaculares. Cuando recibí el mail de Verónica Hansen queriendo colaborar en el blog puntualmente ofreciendo consejos relacionados con la fotografía a todos los seguidores, no me lo pensé mucho, me pareció muy buena idea poder contar con la experiencia y la perspectiva de una fotoperiodista americana (Texas) afincada en Barcelona: Verónica Hansen Weddings. Ha trabajado durante siete años como fotógrafa para revistas, publicidad y, por supuesto, para bodas. Su estilo es muy personal y cinematográfico, ya que intercala tanto técnicas analógicas como digitales. Le encanta contar historias, así que os dejo con su post de hoy... 
Después de escuchar a muchas novias, queda claro que su mayor pesadilla es que los dioses las maldigan con una tormenta espantosa justo en el día de su boda. Lo normal es que las parejas sueñen en cómo la luz del sol va a iluminar perfectamente sus rostros, posándose suavemente sobre su primer beso como marido y mujer. Y en España muchas veces esta ilusión se convierte en realidad ¡Hurra! 
¿Pero, qué pasa si asisten a tu boda esas molestas gotitas de agua que no han pagado el cubierto? ¿Pánico? ¿El Fin del Mundo? ¿Llorar como si hubiera sequía y la única solución fueran tus lágrimas?  ¡Noooop! ;-) ¡Tranquilita! Alégrate, porque ahora tus fotos van a tener un look único y una luz muy favorecedora. Os explico porqué:
Nubes, cielos turbulentos y superficies mojadas nos dan mucho juego a los fotógrafos. Conociendo la técnica adecuada, se pueden crear fotos es-pec-ta-cu-la-res que no son posibles de obtener en un día soleado. Fíjate: reflejos preciosos y cielos épicos.


De hecho, con lluvia, se obtienen las fotos más románticas y con una luz muy suave porque se evitan sombras y luces duras que no favorecen rostros. Además, una luz de lluvia se traduce en fotos sin bizquear. ¡Menuda suerte tienes!


Y si aún no estás convencida recuerda que ¡la lluvia te da la oportunidad de usar un paraguas! Y en latín, 'para-aqüi' significa 'oro fotográfico', es decir, que las fotos salen preciosas (por cierto, como te habrás dado cuenta, al ser americana… ¡no tengo NI IDEA de latín! ;-)).


Os escribo todo esto porque hace poco fotografié una boda en la costa de Camboya, donde empezó a llover justo durante la ceremonia al aire libre. ¡Pero la pareja y los invitados dijeron que no pasaba nada y siguieron con ella! Sumando lo relajados que estaban todos con lo que os acabo de contar más la luz y la lluvia, obtuve unas imágenes divertidas y especiales. Por tanto, si el día de vuestra boda caen unas gotitas de agua, coged un paraguas y una sonrisa. ¡Vuestras fotos van ser espectaculares! Imágenes Verónica Hansen Weddings.