Solo quiero bailar y otros poemas

Solo quiero bailar
Solo quiero bailar
Mover el aire con mi cuerpo
Condicionar mi alma a esa alegría de mis caderas y mis pies torpes
Solo quiero bailar
Y olvidarme de mi misma
No usar más el traje de la desconfianza
Hacia mí o hacia el mundo
Volar hacia lo mejor: el ritmo de la música
y su sonido rebotando en el espacio
Tú eres mi única religión
Tú eres mi única religión, mi único partido
Cuando no puedo dormir
insomne
Solo a ti te convoco
Pienso en ti tan fuerte que tu nombre suena como si lo pronunciara con  parlante
por toda mi casa
Cada pared escucha su sonido
Cada particula mínima de polvo  tiembla levemente con aquella vibración
flota en el aire cada silaba que te reconoce.
Tu eres mi única religión
Mi único partido
Que elijan a quien quieran
Que Gobiernen si es que pueden
Yo  solo quiero ser colonizada por ti
El dictador,
Rey y dios
del templo de mi cuerpo
El día oficial de soñar contigo
Hoy es el día oficial de soñar contigo
De verte en cumpleaños imaginarios
En camas olorosas y fresquitas
Tibias
Llenas de tu perfume y tus pecas
Con mi cabeza en tu pecho
Y tus brazos en mí
Hoy es el día oficial de soñar contigo
De llamarte en la inconsciencia y verte desnudo
1,2,3 entre mis piernas
1,2,3 en ese sano ejercicio de tus habilidades dentro de mi
Amor
Si todos los sueños que tengo contigo fueran reales
Hoy estaríamos felices redescubriéndonos
Te pareces a la luna y lo sabes
Te pareces a la luna y lo sabes
pero no por lo inalcanzable
que también
por lo mucho que te veo de lejos y me haces alucinarte
mirarte entre sombras,
sentirte aquí como espejismo del deseo que despiertas
cada día,
inexplicablemente,
menos fugaz en mí
te pareces a la luna
por lo mucho que brillas en mi cuarto
cada noche
luces down: entre la oscuridad del silencio surge tu nombre
luces de la ciudad
amor
eres como las luces de la ciudad
una incógnita
un secreto a voces
un destello
un recuerdo
que toco cada noche cuando sueño contigo
Tu y yo éramos expertos en desapariciones
Tu y yo éramos expertos en desapariciones
escapistas
ilusionistas del placer continuo por horas
tu y yo eramos magos
brujos
hacíamos maravillas
desapareciendo al entorno
volandonos del aburrimiento
eliminando el temor
abrazábamos el silencio
solo interrumpido por los gemidos
tuyos y míos
en la habitación de hotel