Sopa de cerveza y queso

¡Si sois amantes de la cerveza, os va a encantar esta sopa, calderer@s!

Se tarda sólo 30 minutos en tenerla lista, pero es tan sabrosa que parece que tiene mucho más trabajo prepararla.

Además se puede preparar con ingredientes que seguro tenéis en casa. Esta sopa es el final perfecto para esa zanahoria perdida por el frigorífico desde hace semanas. 🙂

La sopa de cerveza es una sopa típica de Europa Central y de origen muy humilde. Dependiendo del país, existen muchas variaciones (con huevo, con azúcar, con canela, con nata, sin verduras, las que añaden carne..), pero todas tienen como origen una base de bechamel ligera a la que se le agrega la cerveza. De todas las versiones de esta sopa yo he querido quedarme con la que incorpora queso a los ingredientes.

Algunas variaciones típicas en la elaboración de la sopa de cerveza, son la zupa piwna de Polonia,  y la biersuppen de Alemania.

Ingredientes: (para 2 personas)

• 1 rama de apio
• 1 zanahoria pequeña
• 1/2 cebolla
• 2 dientes de ajo
• 1 guindilla
• 3 cucharadas de harina
• 4 cucharadas de queso rallado (yo he usado Flor de Esgueva)
• 1/2 vaso de leche
• 1 vaso y 1/2 de cerveza
• 750ml de caldo de verduras
• sal y pimienta
• aceite de oliva (o mantequilla)

Elaboración:

Picamos el ajo y la cebolla finamente. Troceamos el apio y zanahoria en brunoise.

En una sartén ponemos unas cucharadas de aceite de oliva (o en su lugar, mantequilla) y los doramos junto con la guindilla y un poco de sal para que sude la cebolla. Cuando estén trasparentes, añadimos las verduras y cocinamos durante 3 minutos.

Cuando el ápio y la zanahoria comiencen a estar tiernos, retiramos la guindilla, para no hacer la sopa picante en exceso, y añadimos la harina a la olla. Removemos durante unos segundos para tostarla ligeramente y a continuación incorporamos la leche sin parar de remover, hasta que obtengamos una bechamel ligera.

Es el momento de añadir la cerveza y el queso. Seguimos removiendo durante dos minutos sin parar para integrar bien todo.

Yo rallé directamente el queso sobre la olla. Si lo hacéis así, bajad un poco el fuego para que no se pegue.  Otra opción es rallar el queso con antelación, o usar queso ya rallado.

Es el momento de incorporar el caldo de verduras y rectificar de sal y pimienta, dependiendo del tipo de caldo que estéis usando y si está ya salado o no. Otra opción es usar una pastilla de caldo y agua.

Vamos añadiendo el caldo de verduras poco a poco hasta que consigamos la textura que deseemos para la sopa. Yo no la dejé demasiado densa y pero sí consistente.

Dejamos cocinar 20 minutos a fuego medio.

¡Y ya tenemos lista nuestra sopa de cerveza y queso! No me podréis negar que esta receta es todo un reclamo para calentar el cuerpo ante la bajada de las temperaturas: fácil, económica, rápida de hacer y encima está deliciosa.

Si os gusta el pan, esta sopa se presta mucho a ir mojando rebanadas de algún pan recio a la vez que nos la comemos.

Espero que os haya gustado y os animéis a hacerla en estos días más fríos.

¡Que aproveche, calderer@s!