Team Building y coaching dos patas de un mismo banco

Empezar por entender que ambos conceptos son un proceso y no un resultado es vital si lo que se quiere es conseguir llegar al objetivo marcado por nuevas vías de creación adaptadas a las exigencias que la sociedad que si está implantada en este nuevo siglo exige. Coaching es el arte de reinventarnos nuevamente usando  tanto lo ya conocido como la investigación laboriosa de conocernos y profundizar en nosotros mismos, tarea difícil especialmente por el miedo que entraña, pero sin duda alguna tremendamente agradecida por tantos beneficios como aporta. Team Building es la creación de un equipo de alto rendimiento comandados por un líder que gestiona y potencia los talentos existentes, favoreciendo el uso de la imaginación para ser creativos y dar rienda suelta a nuevos puntos de vista transformando los conflictos en conflictos creativos. Se le puede llamar igualmente reinventar la vieja idea de la estructura de equipo en la que sólo se trabaja a golpe de mando.
Reinventarse no es una palabra mágica pero el proceso en el cual navegamos para llegar a diferentes puertos con el uso de diferentes herramientas si que pudiera tener una especie de magia, resulta difícil de explicar aquello que se vive como un fluir de emociones, pensamientos y acciones alrededor de nuestro cuerpo. Poner palabra a la acción es muy difícil cuando no imposible y poner voz a una experiencia para poder transmitir con plenitud el contenido del mensaje resulta imposible si lo dejamos únicamente a los designios del raciocinio.
Son en estas circunstancias donde un conocimiento amplio y detallado de nuestro cuerpo nos servirá de resorte para poder tener dominio absoluto de nuestro arte de comunicar. Al variado repertorio de estrategias de la mente le sumamos las aprendidas y desarrolladas por nuestro cuerpo, pudiendo dejar a nuestros interlocutores totalmente pasmados.
Tanto las actividades de coaching como team building con recursos de ocio que propongo desde este blog permiten a las personas navegar sin temor a invadir espacios ajenos y profundizar en aquellos lugares de nuestro cuerpo que aún desconocemos. Son muchos los vericuetos que no conocemos debido al miedo que  socialmente supone ser fiel a uno mismo y dejar de lado normas o dogmas sociales. Pero también en toda la vida de una persona se hace necesario, por que la realidad es muy distinta al cuento vendido.