Techos altos, grandes ventanales y buena iluminación

Si hay algo en lo que somos muy diferentes nórdicos de españoles, a la hora de decorar un hogar, es en la iluminación, en un amplio sentido de la palabra.

Hablamos de los gustos de la mayoría de españoles, no de los profesionales, gente que tiene casas de revista, ni de gente diferente, sino de ese 60-70% que duerme con las persianas bajadas todo el año o en verano viven a oscuras todo el día, porque la luz les molesta o da calor.

Ese porcentaje, a la inversa ni se acerca, en Dinamarca por ejemplo, donde nadie duerme a oscuras, (en invierno porque toca, la naturaleza es así, pero en verano que hay muchísimas horas de luz ni se plantean poner cortinas o persianas porque se haga de día a las 3 de la mañana).

El nórdico busca la luz natural todo el tiempo y un rayo de sol, por eso, sólo los que llevan mucho tiempo aquí viviendo se esconden a la sombre un mes de agosto a las cuatro de la tarde, el resto lo intentarán absorber al máximo, os suena ¿no?

Es por eso que la iluminación natural en casa es muy importante, y para ello edificios y villas se construyen con grandes ventanales que dejen entrar el exterior dentro de casa, todo lo posible. Lo del aislamiento jamás es una preocupación, son ventanas como mínimo de doble cristal, triple u otros tratamientos que protegen bien de la intemperie.

No solo se ilumina con más ventanas o más grandes, los elementos de la decoración también han de ser luminosos, por eso tanto blanco y colores claros, para reflejar lo máximo posible esa luz natural.

Mirad que maravilla de ventanales tiene este apartamento de 54 m², construido originalmente en 1912, superelegantes, con ese remate en un arco. Si os fijáis, el piso tiene como el del post de ayer, esos elementos decorativos originales tan elegantes y distinguidos, molduras, rosetones… pero sin duda la iluminación natural y como se ha destacado es de lo mejor de esta vivienda de segunda mano. ¿Os gusta? ¡Feliz miércoles!