El síndrome de abstinencia es la causa más frecuente de recaídas en la deshabituación tabáquica y la peor soportada por las personas que están dispuestas a abandonar el hábito de fumar. Por tanto es fundamental evitar, en la medida de lo posible, los síntomas de la abstinencia para incrementar el porcentaje de éxito.
Sistemas de administración de nicotina
Chicles y comprimidos de nicotina
- Los fumadores pueden regular su consumo de nicotina para evitar los síntomas del síndrome de abstinencia
- Su uso es seguro (usarlo 5 años no aumenta el riesgo cardiovascular)
- El consumo acompañado de ciertas sustancias como el café puede reducir la absorción.
- Es más eficaz a corto plazo (4-6 semanas) que para prevenir recaídas.
- Efectos adversos más frecuentes: indigestión, náuseas, flatulencia, diarrea, úlceras.
Parche transdérmico de nicotina
El parche está constituido por tres capas: una inferior que se adhiere a la piel, una intermedia cargada de nicotina y una superior protectora.
- Facilidad de cumplimento del tratamiento
- Es efectivo incluso sin consejo médico, aunque aumenta la posibilidad de abstinencia si se acompañan de asesoramiento.
- En grandes fumadores no es completamente satisfactorio
- Efectos secundarios más frecuentes: picor, eritema y quemazón en la zona del parche.
Spray nasal de nicotina
- Especialmente útil en pacientes con alta dependencia o con úlceras bucales o enfermedades dermatológicas.
- Mayor riesgo de dependencia nicotínica por la mayor rapidez de absorción.
- Efectos adversos: irritación nasal y de garganta, lagrimeo y estornudos.
La utilización de TSN en fumadores de alto riesgo debe ser valorada cuidadosamente
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